Tohoku, Japón:
La exposición “La región de Tohoku: Reconstrucción para un futuro mejor” se encuentra en las salas temporales del primer piso en el Museo para la Identidad Nacional (MIN), en el barrio Abajo, frente al Correo Nacional en el centro de Tegucigalpa.
La exposición estará hasta el 29 de febrero. El MIN abre sus puertas al público de martes a sábado de 9:00 AM a 5:00 PM. Los domingos de 10:00 AM a 4:00 PM. Cierra todos los lunes del año. La entrada a la exposición es completamente gratis. Si desea más información, puede llamar al teléfono (504) 2238 7412 o al (504) 2238 7395.
“El 11 de marzo del 2011, un devastador terremoto de magnitud nueve y posteriormente un tsunami azotaron la región de Tohoku en el noroeste Japón…” Así comienza esta historia. El texto proviene de la cédula que abre la exposición “La región de Tohoku: Reconstrucción para un futuro mejor” en las salas temporales del Museo para la Identidad Nacional (MIN), en el centro de Tegucigalpa.
La catástrofe de Japón conmovió al mundo entero. De la noche a la mañana, la humanidad entera vio con horror los mil detalles trágicos que provocaron los dos fenómenos naturales. Inmediatamente, la ayuda internacional se volcó sobre la región de Tohoku: Australia, Corea del Sur, Estados Unidos, México, Honduras, India, en fin, decenas y decenas de países ayudaron de muchas formas distintas.
La exposición fotográfica está dividida en dos partes. La primera, titulada “La reconstrucción”, muestra la zona afectada justo después del desastre y los esfuerzos de los equipos extranjeros y nacionales trabajando. La segunda parte se titula “La belleza de Tohoku” y nos brinda imágenes de la región y la belleza casi infinita de sus cerezos, sus puentes, festivales tradicionales y escenarios naturales. Una maravillosa invitación a viajar de inmediato a disfrutar de este espacio extraordinario de Japón.
Debo confesar que cuando llegué al MIN tenía un cierto prejuicio de estar asistiendo a una exhibición de imágenes cargadas de tristeza, horror y llanto. Tal vez porque eso ha sido nuestra realidad nacional en las últimas semanas y no estaba muy seguro de querer cargar más pesar en mi espíritu.
Afortunadamente, me equivoqué. Lo que encontré fue una muestra de imágenes llena de alegría por tener una nueva oportunidad de vivir y crecer. Vi gente de todas partes del mundo ayudando y gocé del renacer de una tierra azotada por la destrucción. Pude apreciar el verdadero espíritu humano de solidaridad y empuje ante la adversidad. Y quise replicarlo.
El texto de la exposición termina diciendo: “Por medio de esta exposición, nosotros, con profundos sentimientos de aprecio y agradecimiento para los pueblos que adhieren sus esfuerzos a los nuestros, tenemos el placer de dar a conocer los avances de la hermosa tierra de Tohoku en pro de su anhelada restauración”.
Creo que es una digna manera de dar las gracias y avanzar con orgullo y una sonrisa hacia el mañana. Algo que podemos copiar como nación.