El exarquero colombiano Miguel Calero, que formó parte de la selección de su país y cosechó numerosos títulos en el fútbol mexicano, falleció el martes, informó el Grupo Pachuca. Tenía 41 años.
Calero había sido diagnosticado la noche del lunes con muerte cerebral
después de ser sometido en un par de ocasiones a cirugías por una trombosis. La noticia conmovió a los mexicanos.
Pachuca informó en un comunicado que Calero falleció el mediodía del martes.
El grupo lo calificó como el 'máximo símbolo de los Tuzos', como se conoce al club, con el que Calero conquistó cuatro títulos de liga y una Copa Sudamericana, la única que han obtenido los equipos mexicanos, que disputaban ese certamen en calidad de invitados.
'Miguel Calero fue un futbolista que marcó una gran época en la historia del Club Pachuca', informó el equipo.
En Honduras, el presidente de la Federación de Fútbol (Fenafuth) Rafael Callejas escribió en su cuenta de Twitter: 'Con mucho pesar por el diagnostico de Miguel Calero, quien jugo en varias ocasiones contra H con Seleccion Colombia'.
Pachuca anunció que los funerales de Calero se realizarán la tarde del mismo martes en un auditorio de la capital del estado central de Hidalgo.
'Agradecemos a todos sus muestras de cariño, apoyo y solidaridad para con él y su familia', añadió el club.
Horas antes del anuncio sobre su muerte, los familiares del exarquero mantenían la esperanza de un milagro e incluso algunos no pensaban en principio desconectarlo del respirador artificial.
En tanto, el presidente colombiano Juan Manuel Santos hizo eco de la consternación de muchos de sus compatriotas ante el anuncio de la muerte cerebral del exportero de la selección.
'Nos duele mucho a todos los colombianos lo sucedido con Miguel Calero', escribió Santos en su cuenta en Twitter. 'Acompañamos de corazón a su familia. El fútbol está de luto'.
John Jairo, uno de los hermanos del 'Show' Calero, dijo que, pese al contundente parte médico, no descartaba la posibilidad de una recuperación.
'Tenemos la fe, la esperanza de que esa luz que existe (Dios) va a brillar', manifestó John Jairo en Cali a la radio local la FM.
El médico Edgar Nathal, a cargo de atender a Calero en el hospital Médica Sur de la Ciudad de México, confirmó el lunes por la noche que la condición cerebral era irreversible.
El martes, Nathal anunció que a Calero se le seguirían suministrando fármacos, oxígeno y líquidos para conservar su vida hasta que desfalleciera su organismo.
'La legislación (mexicana) no permite desconectar', al paciente, explicó Nathal, en declaraciones a Blu Radio de Colombia.
'Por razones médico-legales en México no podemos hacer ninguna maniobra de desconexión, se tienen que dar los aportes de soluciones y oxigenación hasta que sea el propio organismo de Calero el que determine en qué momento es insuficiente para continuar llevando sus actividades vitales', subrayó el médico.
El comunicado del Grupo Pachuca que informa el deceso no precisó los detalles en que éste se dio. No mencionó por ejemplo si la condición de Calero se agravó hasta poner fin a su vida o si el exfutbolista fue desconectado de los sistemas que le permitían seguir respirando.
John Jairo y Milton, hermanos del 'Cóndor', viajaban con otros familiares el martes por la tarde, para estar al lado del exarquero, quien padeció una retrombosis, según los médicos.
Milton había indicado que la familia determinaría si Miguel se mantenía conectado a un ventilador mecánico, si permanecía en México o era trasladado a Cali.
Calero vivía en Pachuca desde 2001 con su esposa Sandra y los hijos Miguel Angel de 20 años y Juan José de 14.
Luego de brillar con la selección de Colombia, Deportivo Cali y Atlético Nacional, Calero se vinculó con el Pachuca y como su gran estrella lo ayudó a conseguir cuatro títulos locales y una Copa Sudamericana.
El arquero comenzó a tener problemas de salud a consecuencia de una fractura en una clavícula que supuestamente le generó una trombosis venosa en el brazo izquierdo. En septiembre de 2007, lo operó un especialista en Estados Unidos, y Calero estuvo inactivo un buen tiempo.
Calero, de 41 años, se retiró como futbolista en 2011 y era el entrenador de arqueros del Pachuca cuando sufrió la dolencia en su casa el 25 de noviembre.
La víspera, Nathal anunció que el problema de Calero era irreversible, y que incluso si no era desconectado del respirador, un deceso podría sobrevenir de forma espontánea.
'Aunque mantiene actividad musculatoria, lo que resta es esperar lo inminente y que seguro pasará, que es un paro cardio-respiratorio', agregó Nathal.
Tras ser operado, Calero estuvo en un coma inducido para mitigarle un edema cerebral y los médicos le redujeron la sedación el pasado viernes. Pero no evolucionó como esperaban y lo volvieron a sedar.