La llegada del año bisiesto trae consigo un rosario de leyendas que los adultos mayores, en especial del área rural, aún comparten con las nuevas generaciones.
Para unos es la época de la buenaventura, mientras que para otros es un año de fatalidades.
Entre los refranes más populares en torno al año que trae el 29 de febrero cada cuatro años, destacan “año bisiesto, año siniestro” y ”año bisiesto, ni viña ni huerto”, ambos relacionados con la fatalidad.
Los agricultores consideran que el año bisiesto es incierto, pues trae consigo lluvias frecuentes que puede acarrear una excelente cosecha, pero al igual la pérdida de los cultivos.
Ramiro Mendoza, campesino, aseguró que en los años bisiestos sus parcelas le generan mayor producción de granos básicos.
“Mi padre también nos contaba esta misma experiencia”, explicó el anciano.
De acuerdo con Mendoza, otro beneficio es que hay mayor incremento de los animales para la cacería.
Otros amigos contemporáneos de Mendoza que decidieron participar en la entrevista aseguraron que la extracción de peces se duplica durante los años que poseen 366 días.
Para otros como Venancio Varela, el año bisiesto es igual al resto, con la única diferencia que trae un día más.
“Yo creo que Dios sí puede hacer milagros, pero que un año porque traiga un día más será más próspero o que traerá algunas cosas a mi vida no es cierto, pero respeto esas creencias”, manifestó.
Otro de los consultados fue Juan Corrales, quien expresó que lo que ha oído decir es que pasan “cosas misteriosas”, pero que él nunca ha vivido una experiencia fuera de lo normal.
“Yo he escuchado decir que este año es de prosperidad, en especial para los que tienen negocios”, relató. También dijo que ha escuchado que las personas que nacen en este día son personas con suerte.
“Los nacidos en años bisiestos desarrollan un particular interés por el tema del dinero”, agregó.
Unos hasta se atreven a señalar los beneficios de nacer en esta fecha y lo que representan los horarios en que llegan al mundo los nacidos el 29 de febrero.
“Quienes nacen a mediodía nacen con la capacidad de sobresalir y destacarse en escenarios públicos, pero por el contrario, quienes nacen a eso de las cinco de la mañana, tienen la capacidad de lucha y la disposición para enfrentar el reto de la vida con el alma”, argumentó Saturnina Ramírez, originaria de San Juan de Flores.
Las explicaciones son diversas, en su mayoría revelan que en este tipo de años se reciben cambios significativos respecto a los temas financieros, producción, cacería y pesca.
Para los pragmáticos son tan solo doce meses más, donde las alegrías, la tristeza, los triunfos y las derrotas se mezclan entre sí como en cualquier otra temporada.
Lo cierto es que el año bisiesto nos regala un día más: por cierto un día más de trabajo, sin paga extra, pero también un día más para hacer el bien, producir y disfrutar de la vida.¡Feliz año bisiesto!