TEGUCIGALPA, HONDURAS.- A pesar de no gozar de la popularidad con que cuentan otras disciplinas en Honduras, el balonmano es un deporte apasionante que lucha por abrirse espacios y superar las adversidades en el país.
La velocidad de una ráfaga durante la incesante ida y vuelta, el sonido de las suelas rechinando contra la duela, los saltos acrobáticos de los atacantes a la hora de hacer un remate, las férreas marcas y la solidez de los porteros, son solo algunos de los condimentos que enganchan a los jóvenes para practicar este deporte.
Asimismo, el hecho de que tenga muchos fundamentos en común con disciplinas más populares como el fútbol y el baloncesto es un factor muy importante para que el también llamado como “handball” sea un deporte muy practicado a nivel mundial, principalmente en Europa.
Pero al otro lado del Océano Atlántico el calor tropical de Honduras ha intentado abrazar este emocionante deporte en donde dos equipos de siete jugadores buscan hacer prevalecer quien es el mejor sobre la cancha.
Desde la década de los 90 esa es la labor que ha buscado ejercer la Federación Hondureña de Balonmano (FHB), la cual en los años recientes ha tenido en mente un ambicioso proyecto: masificar esta disciplina en cada rincón del territorio nacional.
Tras la llegada de Reidel Girón a la presidencia de esta entidad en 2019, el balonmano ha vivido un importante crecimiento, sin embargo, desde la federación señalaron a EL HERALDO que no ha sido un camino nada fácil.
“Ha sido terrible cuando iniciamos allá en el año 2019 y vino la pandemia, seguimos dos años sin poder desarrollar el balonmano y eso nos estancó un poquito. Ahorita estamos ya otra vez con esta nueva ilusión de estos nuevos cuatro años, donde la idea es poder masificar el deporte a nivel nacional, no dejarlo solo a nivel Tegucigalpa, sino que han masificarlo a nivel nacional”, declaró Rafael Elvir, vicepresidente de la FHB.
Elvir añadió que en el último año han realizado trabajos en pro del balonmano en ciudades y municipios como Comayagua, Siguatepeque, La Esperanza, Juticalpa y Tela, pero el proceso de evolución ha sido bastante lento, aunque esto no es impedimento para multiplicar la pasión por este deporte en la zona norte de Honduras, en donde tienen la ambición de llegar hasta San Pedro Sula para hacer despegar esta disciplina.
Fortaleza ante las limitantes
Como es bien conocido por los capitalinos, la Villa Olímpica es el destino al que acuden los ciudadanos de todas las edades que realizan sus diferentes actividades físicas como parte de sus rutinas diarias.
El complejo cuyo nombre oficial es “José Simón Azcona” cuenta con diferentes gimnasios, sin embargo, estos no dan abasto para las distintas disciplinas que ahí se imparten, lo cual representa una limitante para las federaciones de los diferentes deportes.
El balonmano no ha quedado exento y desde la Federación Hondureña de Balonmano reconocen que al no contar con un complejo propio se dificulta en gran medida la posibilidad de practicar de forma adecuada.
“La limitante de no tener una cancha, no tener un propio gimnasio donde podamos contar con suficientes horas de entrenamiento, ya que las horas que nos comparten en la Villa Olímpica solo son dos horas los días lunes, miércoles y jueves, entonces el uso de la cancha es limitado, aparte de lo presupuestario”, subrayó Rafael Elvir.
Pero las limitaciones de espacio, las pocas horas que se puede entrenar en la semana y la escasez de preparadores no es impedimento para frenar la ilusión de una camada de chicos que sueña con romper los paradigmas y hacer que el balonmano sea uno de los deportes más seguidos en Honduras.
Al momento de visitar la Villa Olímpica el equipo de EL HERALDO se encontró a un grupo de jóvenes chicas entrenando afuera del Gimnasio #3, mientras las demás disciplinas culminaban sus prácticas vespertinas.
Eran las primeras horas de la noche y con mucho esfuerzo y sobre todo pasión, German Torres pulía a unas motivadas chicas que sueñan con hacer historia y poner en alto el nombre del país cinco estrellas.
El joven adiestrador, que a sus 21 años inició su camino en el deporte que tiene cierto parentesco con el baloncesto, relató con mucho orgullo su trabajo dentro de la federación, el cual consiste en formar a los nuevos prospectos en la disciplina que es una parte fundamental de su vida.
Al momento de atender a EL HERALDO, Torres estaba por iniciar un entrenamiento más al frente de la selección femenina Sub-19, a la cual con mucho esmero prepara para el torneo Trophy, competición femenil patrocinada por la Federación Internacional de Balonmano (IHF, por sus siglas en inglés), el cual se desarrollará en Guatemala del 8 al 14 de mayo.
Las entusiastas chicas buscarán sacar la característica “garra catracha” en una justa donde también participan otros elencos centroamericanos como la propia Guatemala, Costa Rica, El Salvador, Panamá y Nicaragua.
Como todo un mentor orgulloso de sus alumnas, German Torres destacó el esfuerzo y la dedicación de sus dirigidas por el balonmano.
“Como todo deporte tiene su evolución y las chicas lo primero que han aceptado es amar el deporte como tal y luego seguir esforzándose, haciendo su sacrificio, porque algunas de las chicas solo salen del colegio y vienen a entrenar, entonces hay mucho sacrificio de parte de ellas”, expresó.
Y es que el entusiasmo que predica German, al igual que los demás entrenadores, es un motor que ayuda a las jóvenes promesas del balonmano a salir adelante pese a las dificultades que rodean a todos los deportes en Honduras.
En el rostro de las muchachas era evidente la ambición de triunfar, pero principalmente divertirse con una bonita disciplina deportiva.
Balonmano urge de más apoyo
Al menos en los últimos cuatro años, el balonmano en Honduras ha intentado tener un mayor crecimiento en el territorio nacional, sin embargo, aún está muy lejos de equipararse con el nivel alcanzado por los demás países de la región.
Entre los logros de la Federación de Balonmano se encuentran la organización de ligas colegiales, departamentales y a nivel nacional, al igual que extender la práctica de este deporte hacia otros puntos del país, pero pese a ello reconocen que se requiere de más apoyo.
“Hemos estado estancados en el deporte. Entrenadores hay muy pocos. Hay que acordarse que la retribución monetaria a ellos es poca, algunos lo hacen ad honorem. Creo que si llegamos a tener de 6 a 10 entrenadores diría que es mucho”, mencionó el vicepresidente de esta entidad, Rafael Elvir.
A su vez, Elvir reconoció que apenas existen unos 60 atletas que practican este deporte, aunque adelantó que el objetivo es ampliar este número a unos 250 a nivel nacional.
“En cuanto a atletas, creo que andamos en un promedio como 60 atletas activos sumando todos los equipos. La intención es expandir el balonmano y tener unos 250 atletas activos a nivel nacional”.
Sin embargo, Elvir es consciente que el crecimiento del también llamado handball es lento.
“Es lento, ha sido bastante lento. Como es un deporte nuevo que lo miran, no es un deporte televisado si no que hasta que lo miran ahí se empapan y a algunos les puede gustar. Ahorita la idea es masificar el deporte y traer talento para nuestras selecciones”.
Como un verdadero amante del balonmano y como uno de esos entrenadores que confían plenamente en la juventud hondureña, German Torres hizo un llamado para que la población volteé sus ojos hacia las duelas en donde cada semana pulen a los nuevos talentos.
“Sabemos que es un deporte que está en desarrollo y sería bueno que tuvieran la intención de venir a ver o practicar balonmano porque es muy divertido y nos ayuda también a nuestra vida, porque sabemos que hacer actividad física es un bienestar para nuestra vida”, mencionó.
“Sabemos que hemos ido en un país donde la delincuencia es mucha, entonces los chicos buscan alternativas y nosotros como entrenadores damos la la alternativa de que practiquen un deporte y se alejen un poco de las calles”, añadió.
Raquítico presupuesto
A pesar de que la Comisión Nacional del Deporte (Condepor) cuenta con el presupuesto más alto de toda su historia en 2023 (L 409,526,382), desde la Federación Hondureña de Balonmano señalan que aún permanecen en el abandono y que es una raquítica cantidad la que se les ha consignado desde la institución estatal.
“Todavía nos mantenemos con el presupuesto que nos da el gobierno que es de 200,000 lempiras anuales, entonces es muy poco para todo lo que tenemos que hacer. Lo que tratamos de hacer es que con la ayuda que nos da el Comité Olímpico y Condepah es tratar de hacer el mejor uso de los recursos”, lamentó Rafael Elvir.
De acuerdo con el vicepresidente de la federación se requiere una cantidad de al menos 4 millones de lempiras al año para que esta entidad pueda ejecutar los proyectos que tienen en mente.
“Podríamos expandir más nuestro deporte, adquirir más recursos, más materiales, podríamos tener la facilidad de también tener nuestro propio polideportivo, que es la intención de nuestra federación”.
Ante esta situación, Elvir hizo un llamado a las autoridades del deporte en Honduras para brindar el apoyo que se necesita a las diferentes federaciones deportivas del país.
“No es solo al balonmano, yo creo que debe ser a todos los deportes. El deporte mantiene alejada a la juventud de las drogas y de los malos pensamientos. Yo creo que deberían de proyectarse más en poner más atención en el deporte, así como exigen resultados, así deberían de apoyarnos también deberían de apoyarnos al deporte a nivel nacional”, concluyó.