Debido a la reciente revuelta ocurrida durante el partido de Real España y Marathón, la junta directiva de La Liga Nacional se reunió de emergencia para decidir e l futuro de los juegos de la semifinal del torneo de clausura de Honduras.
'Hasta que garanticen que habrá seguridad en los partidos de Liga Nacional, se reanudarán', expresó el secretario de la Liga, Roque Pascua, durante una rueda de prensa.
'Estamos tomando esta decisión para salvaguardar a los actores, tanto jugadores, como equipo técnico', dijo Pascua.
En relación a las nuevas fechas de los juegos dijo que aún 'no podemos poner fechas para los partidos de semifinal en la Liga Nacional, debemos proteger el esparcimiento de las personas'.
Pascua también expresó su preocupación por aquellos hondureños que podrían perjudicar los juegos.
El funcionario pidio 'calma, tolerancia y paciencia' a la sociedad para poder resolver los problemas que están pasando.
De igual manera recalcó que hasta que la Secretaría de Seguridad garantice el bienestar en los partidios, éstos se llevaran a cabo. Lo que puede significar que el torneo de clausura termine hasta enero del próximo año.
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Disturbios
La jornada de semifinales inició con gran algarabía en el estadio Morazán de San Pedro Sula, sin embargo al minuto 71 del duelo entre Real España y Marathón, el terreno de juego se convirtió en un campo de batalla.
Aficionados verdolagas empezaron a tirar botes y piedras después de que el árbitro Armando Castro decretara lanzamiento penal a favor de la Máquina.
Los enfurecidos hinchas forzaron los portones de seguridad e irrumpieron el césped del coloso sampedrano. La violenta acción duró apróximadamente 20 minutos y obligó a la suspensión del partido.
Niños, adultos y ancianos que disfrutaban el show deportivo terminaron gaseados, ya que agentes policiales lanzaron gas pimienta para controlar a la enardecida turba.
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