Con doblete del omnipresente Cristiano Ronaldo, Portugal ganó 2-1 a Holanda y avanzó como segundo del Grupo de la Muerte (B) a los cuartos de final de la Eurocopa, el domingo en Járkov, donde la Oranje se despidió con fracaso, hundido por la guerra de egos de sus astros.
Portugal, finalista europeo en 2004 y cuartofinalista en 2008, jugará con la República Checa el próximo jueves en Varsovia (18h45 GMT) por una plaza en semifinales, con un Ronaldo entonado tras romper el maleficio de no poder marcar en el torneo polaco-ucraniano.
El mediocampista holandés Rafael Van der Vaart abrió el marcador a los 11 minutos con un zurdazo que se clavó al ángulo del portero Rui Patricio, luego de una apilada de Arjen Robben, pero la estrella del Real Madrid rescató al once luso (28, 74) para mantener su sueño del título europeo y Balón de Oro.
CR7 respondió con una veloz y precisa definición, después de un pase al vacío del lateral derecho Joao Pereira, en una noche inspirada en la que acosó constantemente el arco de Maarten Stekelenburg. Su gol se lo dedicó a su hijo que cumplía este domingo dos años.
El segundo llegó tras un centro cruzado de Nani, Cristiano tomó el balón, desparramó a Gregory van der Wiel y disparó al primer palo (74) de un desarmado portero Maarten Stekelenburg.
Con el triunfo de Alemania ante Dinamarca (2-1) en Lviv, los alemanes ganaron el grupo con 9 puntos, seguidos por portugueses con 6. Los daneses quedaron terceros con tres, tras el sorpresivo 1-0 frente a Holanda, que se marchó sin puntos.
La primera parte resultó un festival de emociones, cumpliendo lo que prometía un partido a matar o morir entre dos colosos repletos de estrellas. Holanda necesitaba ganar por dos goles de diferencia, sumado a una victoria alemana frente a los daneses en Lviv, y puso marcha a su ilusión con Rafa.
Van der Vaart, titular por primera vez en el torneo y al mismo tiempo capitán, pagó enseguida la apuesta del técnico Bert van Marwijk, que salió con un once más ofensivo, con Robin van Persie y Klaas-Jan Huntelaar en punta.
La derrota dejaba fuera al equipo de Paulo Bento, que reaccionó con un disparo en el palo y un cabezazo a quemarropa de Cristiano Ronaldo (15, 23), un mano a mano de Helder Postiga desperdiciado tras un pase hacia atrás de un defensa holandés (17).
Holanda tampoco bajaba el pie del acelerador. Nigel de Jong cabeceó incómodo en el área chica (23) y Wesley Sneijder probó las manos del meta Rui Patricio con un misil de derecha desde fuera del área.
El ida y vuelta no paraba, pero en esa revuelta la imagen de Ronaldo empezó a agigantarse. Bombazo de derecha (33), cabezazo levemente desviado (35), apilada con desborde y remate dentro del área (40).
Era Cristiano y diez más, después de las críticas de la prensa lusa de la semana por no marcar ante Dinamarca. El mismo que marcó 60 goles en la temporada con la casaca merengue, el que disputa un duelo a distancia en cada presentación frente al argentino Lional Messi.
Los holandeses, que se reclamaban recuperar los 'automatismos perdidos' del Mundial-2010, según el armador del Inter de Milán Sneider, que había reconodido problemas de 'egoísmos' que minaban el clima del vestuario, quedó grogui y no tuvo respuestas anímicas para buscar una remontada histórica.
En la segunda parte Nani desperdició la chance de matar el partido, tras un centro delicioso de CR7 que lo dejó mano a mano en el área ante Stekelenburg. Pero un minuto después (73), la fórmula se invirtió: Nani para Cristiano, que amagó, hizo caer a Van der Wiel y tocó a la red al primer palo del meta.
La última vez que se habían enfrentado, en octavos del Mundial-2006, los lusos ganaron 1-0 en la 'Batalla de Nuremberg', eliminando a Holanda. Cristiano Ronaldo una vez más lo hizo.
