MADRID, ESPAÑA.- El
Ájax eliminó al
Real Madrid este martes en la Champions goleando 4-1 al equipo Blanco en la vuelta de octavos del torneo continental, rematando una semana negra para los merengues que ven escaparse la temporada en siete días.
Los goles de Hakim Ziyech (7), David Neres (18), Dusan Tadic 3-0 (65) y Lasse Schone (72), llevaron al Ájax a los cuartos de final del torneo, sin que de nada sirviera el gol testimonial de Marco Asensio (70).
En apenas una semana, desde que el miércoles pasado cayó en semifinales de la Copa del Rey ante el Barcelona, el Real Madrid se ha quedado sin opciones para esta temporada tras quedar descartado sucesivamente de Copa, Liga y ahora Champions, que era su última esperanza.
Los Blancos perdieron además a Lucas Vázquez y Vinicius, dos de sus hombres más en forma, que tuvieron que salir lesionados en la primera parte, ambos llorando, siendo sustituidos por Gareth Bale y Marco Asensio, respectivamente.
La falta de puntería volvió a condenar a un equipo blanco, que estrelló dos balones en la cruceta, y que echó de menos en la zaga a su sancionado capitán Sergio Ramos, acumulando su cuarto partido consecutivo en casa perdiendo.
Los Merengues, que llevaban una década sin caer en octavos de la Champions desde la temporada 2008/2009, acabaron pitados por su público en medio de peticiones de dimisión del presidente Florentino Pérez.
Había caído el rey de Europa, que en el último cuarto de hora prácticamente sólo intentó que la goleada no fuera mayor.
Los goles de Hakim Ziyech (7), David Neres (18), Dusan Tadic 3-0 (65) y Lasse Schone (72), llevaron al Ájax a los cuartos de final del torneo, sin que de nada sirviera el gol testimonial de Marco Asensio (70).
En apenas una semana, desde que el miércoles pasado cayó en semifinales de la Copa del Rey ante el Barcelona, el Real Madrid se ha quedado sin opciones para esta temporada tras quedar descartado sucesivamente de Copa, Liga y ahora Champions, que era su última esperanza.
Los Blancos perdieron además a Lucas Vázquez y Vinicius, dos de sus hombres más en forma, que tuvieron que salir lesionados en la primera parte, ambos llorando, siendo sustituidos por Gareth Bale y Marco Asensio, respectivamente.
La falta de puntería volvió a condenar a un equipo blanco, que estrelló dos balones en la cruceta, y que echó de menos en la zaga a su sancionado capitán Sergio Ramos, acumulando su cuarto partido consecutivo en casa perdiendo.
Los Merengues, que llevaban una década sin caer en octavos de la Champions desde la temporada 2008/2009, acabaron pitados por su público en medio de peticiones de dimisión del presidente Florentino Pérez.
Había caído el rey de Europa, que en el último cuarto de hora prácticamente sólo intentó que la goleada no fuera mayor.