SAN PEDRO SULA, HONDURAS.- Héctor Vargas cumplió las palabras de
Chelato Uclés: “De
Marathón salís herido o muerto”; el
León de Formosa salió herido, por la puerta de atrás, “sin ninguna llamada para decirme los motivos”.
El adiestrador verde habló en medios de La Ceiba y San Pedro Sula una vez que el Monstruo presentara a Martín García como su nuevo DT: “Es un despido indirecto. Mi pecado fue poner a Marathón en lo más alto y pelearme por el club y solo logré primero que me sacaran, después al no tener cómo pagarme me dijeron que volviera y ya por último me demandaron ante el TNAF. Yo contrademandé”.
El sudamericano que llegó en 1997 a Honduras, negó que el club tenga una deuda de cuatro millones de lempiras: “Es mucho menos y hasta les dije que me lo pagaran mensualmente y no aceptaron... pero lo que me molesta es que no me dieron libertad de buscar trabajo y por eso perdí la opción de ir a Municipal de Guatemala, que antes de contratar a José Cardozo me habló a mí”.
Y finalmente Héctor Vargas se “acordó” de Jorge Pineda, uno de sus asistentes: “No fue leal conmigo. Sé que le llenaron la cabeza al presidente de un montón de chismes pero bueno, yo le ayudé a esta persona a mantener a su familia por cuatro años y así me paga... esto es parte de la vida y uno aprende a conocer a las personas que lo rodean”.
El adiestrador verde habló en medios de La Ceiba y San Pedro Sula una vez que el Monstruo presentara a Martín García como su nuevo DT: “Es un despido indirecto. Mi pecado fue poner a Marathón en lo más alto y pelearme por el club y solo logré primero que me sacaran, después al no tener cómo pagarme me dijeron que volviera y ya por último me demandaron ante el TNAF. Yo contrademandé”.
El sudamericano que llegó en 1997 a Honduras, negó que el club tenga una deuda de cuatro millones de lempiras: “Es mucho menos y hasta les dije que me lo pagaran mensualmente y no aceptaron... pero lo que me molesta es que no me dieron libertad de buscar trabajo y por eso perdí la opción de ir a Municipal de Guatemala, que antes de contratar a José Cardozo me habló a mí”.
Y finalmente Héctor Vargas se “acordó” de Jorge Pineda, uno de sus asistentes: “No fue leal conmigo. Sé que le llenaron la cabeza al presidente de un montón de chismes pero bueno, yo le ayudé a esta persona a mantener a su familia por cuatro años y así me paga... esto es parte de la vida y uno aprende a conocer a las personas que lo rodean”.