La retirada internacional de Lionel Messi tras perder la Copa América sorprendió a la prensa española, que se compadecía este lunes del argentino a quien vieron ganar todo con el FC Barcelona y fracasar repetidamente con la albiceleste.
'Leo Mexit', titulaba en su web el diario madrileño Marca. 'La maldición de Messi y Argentina no tiene fin', proseguía el periódico que, a pesar de su cercanía al Real Madrid, se compadecía del rosarino.
'No hay explicación ni consuelo posible (...) Lo de Leo también es de Expediente X. De terminar en el diván tras cada derrota', explica. Su sala de trofeos como azulgrana está repleta pero 'el rincón que guarda para sus entorchados con Argentina está vacío. Y no será porque no lo ha intentado', añade.
En Barcelona, su adiós a la albiceleste copa las webs de los dos grandes diarios deportivos. 'Messi lo ha visto claro: Argentina nunca será el Barça', afirma en un artículo de opinión el director adjunto del diario Sport, Lluís Mascaró.
En el Barça 'Messi lo ha ganado todo' y ha tenido 'todo lo que ha necesitado para triunfar' pero en Argentina 'jamás ha contado con un proyecto futbolístico que le protegiera y le hiciera mejor'.
Desde la ciudad catalana, nunca se entendió el discutido papel de su ídolo cuando juega con Argentina y las feroces críticas que en ocasiones recibió de la hinchada albiceleste.
'En el Barça y en Barcelona, Messi es Dios. En Argentina, no', dice Mascaró.
'El último fracaso de la selección en la Copa América ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia del crack. Abandona el combinado argentino para centrarse en lo que realmente le hace feliz: jugar en el Barça', añade.
'Leo no volverá a la selección, no quiere volver por sus compañeros, ha llegado a un punto que piensa que es todo culpa suya', señala la periodista Cristina Cubero en el diario El Mundo Deportivo.
En su opinión, el cinco veces ganador del Balón de Oro se vio siempre incómodo ante la eterna comparación con Diego Armando Maradona.
'Maradona regaló a Argentina lo que Leo Messi no ha podido conseguir en el campo siendo el mejor del mundo. Y Leo ha dicho basta. Basta de lágri
