Deportes

Nelson Muñoz del Real de Minas: 'No hemos recibido ni un peso”

Aparte de jugar en Real Minas, el central trabaja en el INE y estudia Derecho. “Ya me había retirado del equipo y el profe me hizo recapacitar”. ¿Y qué opina del torneo?, ¿se debe reanudar?

22.04.2020

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Si no ha saboreado ningún pago en el año, la cuarentena ha venido a enterrar aún más sus esperanzas de recibir algún centavo de Real de Minas en el corto plazo.

“Nos dijeron que la Liga dará un dinero y que de allí nos iban a dar algo. Estar tres meses sin cobrar y solo gastando es bastante complicado”, dispara el capitán minero que ha sabido sobrellevar el encierro del coronavirus entre entrenamientos en casa y sus clases de Derecho en línea.

A diferencia de muchos de sus compañeros, Nelson Muñoz tiene otro ingreso debido a su trabajo en el Instituto Nacional de Estadística (INE) y ha podido desafiar de buena forma esta etapa de austeridad.

“Es una pandemia que ha venido a perjudicar la economía de potencias mundiales y no digamos de países en vías de desarrollo como el de nosotros”, confiesa el actual defensa de Real de Minas, tan estricto en la marca como en sus cuidados ante la amenaza del Covid-19...

¿Qué tal ese día a día en su cuarentena, Nelson?
El preparador físico nos dejó ejercicios de condicionamiento, resistencia, velocidad y todo lo demás. Aparte estoy recibiendo clases virtuales porque también estudio. Mi rutina de ejercicios dura entre 1:10 minutos y 1:25. Trato de tener una buena alimentación porque es importante para estar a tono físico; si no la cuidamos no estamos en nada. Eso no solo es bueno para el fútbol, sino para la vida.

En relación a los cuidados higiénicos, ¿es estricto?
Cuando me toca salir, como hoy que salí al supermercado a hacer compras, antes de entrar a la casa tomo las medidas que nos dieron los cuerpos de salud. Uso mascarilla, guantes y lentes porque esto también entra por los ojos. Toda mi ropa la dejo afuera y entro directamente a bañarme. No salgo mucho al igual que mi familia.

Tienen tres de meses sin pago. ¿Cómo han hecho para pasar esta cuarentena?
Es algo muy difícil. Honestamente, yo no dependo del salario de Real de Minas, pero hay otros compañeros que sí; para ellos es bastante complicado porque netamente viven del salario del fútbol. Otros han buscado otras formas, por ejemplo, Gerson Argueta, aunque le pague Olimpia, andaba vendiendo frutas en el mercado. Hay otros compañeros que también tienen un trabajo extra y con eso salimos adelante en la parte económica.

¿Qué platican entre ustedes los jugadores?
Hemos hablado y hemos dicho que si nos atenemos netamente al salario del equipo va a ser bien difícil porque esto no es de ahorita, sino que es de siempre que nos atrasan dos o tres meses. Hay que buscar otra manera para sobrevivir. Lo ha dicho Güicho Guzmán, que si no buscamos otra forma nos vamos a morir. Hay compañeros que muchas veces se las han visto muy difícil.

¿Qué le han dicho los compañeros a usted como capitán?
Siempre es la pregunta que se hacen los compañeros en el grupo de WhatsApp, que cuándo pagan... pero si es difícil que nos paguen normalmente, en cuarentena, que no hay ningún tipo de ingreso de taquilla ni de nada, es un poquito más complicado. Hay algunos endeudados y otros con el apoyo de la familia pueden salir de eso, pero esperamos que nos resuelvan pronto.

¿Qué papel ha jugado como líder ante la falta de pago?
Eso es súper difícil porque a uno no le pagan y decirle a los compañeros que sigamos, pero el sueño de todos es mejorar las condiciones. Sabemos que solo haciendo buenos partidos y torneos podemos aspirar a otro equipo que nos pueda pagar al día. Esa es la motivación que existe, nosotros decimos que metiéndonos a la pentagonal hay más aspiraciones grupales y personales. No tiramos la toalla por eso. Decimos que si llegamos a la pentagonal, ese estadio de Danlí se va a llenar y toda esa taquilla será para nosotros.

¿Y el DT Raúl Cáceres qué rol ha desempeñado?
El profesor aparte de entrenador ha sido psicólogo y ha venido a cambiar bastante la mentalidad de los jugadores, tanto de los jóvenes como de los experimentados. Quizá no estamos arriba en el top, pero allí estamos siempre peleando, siendo la piedra en el zapato para muchos equipos.

¿Y usted ha pensado en tirar la toalla?
Después del primer torneo, que fue un desastre y en el que todo mundo nos hacía descendidos, yo ya me había retirado. Me acuerdo que una semana antes del partido contra Platense en Puerto Cortés, el profesor Raúl me fue a buscar y me dijo que confiara, pero yo no tenía nada de fe en el proyecto y me sentía descendido. El profe me hizo recapacitar y me hizo volver, pero sí pensé en tirar la toalla.

Quizá hasta ya hubiera terminado la universidad...
Le decía a unos compañeros, porque ahorita solo pude meter dos o tres clases: ‘Si no estuviera acá, porque aquí uno está gastando, metiera cinco o seis clases y ya hubiera terminado’. Hay un montón de compañeros que me han dicho que mejor van a buscar un trabajo porque no ven futuro. Nosotros jugamos por amor a la camiseta y al fútbol porque en este torneo no hemos recibido ni un peso.

¿Qué les ha dicho la directiva respecto al pago?
Nos dicen que ese dinero de la liga es la única esperanza para que medio nos puedan dar algo ahorita. En el equipo no hay ni directiva, solo es Gerardo Martínez prácticamente. A veces uno lo llama, pero el hombre es claro y dice que no tiene dinero. Hay que decir que nos han pagado tarde, pero nunca nos han dejado de pagar. Esa también es una de las cosas que hay que admirar de Real de Minas, porque hay compañeros en otros equipos que les quedaron debiendo tres meses y nunca les pagaron. Aquí siempre nos han resuelto, el dinero cae de un solo.

¿Cree que el torneo se debe anular o reanudar?
Para mí hay que esperar la fecha tope de reinicio que pusieron, el 16 de mayo. Si el virus sigue peor, lo mejor es cancelar el torneo y para mí se le debería dar el trofeo al primer lugar (Motagua), como han hecho otros países... y también que haya un descendido. Creo que sería lo justo.

Usted juega, trabaja y estudia. ¿Cómo hace para que le ajuste el tiempo?
Entreno de 6:00 a 8:00 AM, trabajo de 9:00 AM a 5:00 PM y recibo clases de 6:00 a 9:00 PM. Cuando hay juegos a mitad de semana, pido permiso en mi trabajo a cuenta de vacaciones. He podido llevar a cabalidad las tres cosas.

Tiene un día agitado con tanto quehacer, ¡eh!
Sí, yo le digo a mi mamá que desde que salgo a las 5:00 y media de la mañana vuelvo a casa hasta las 10:00 de la noche, prácticamente solo a dormir. Pero a veces esos sacrificios son los que valen la pena, porque todo esfuerzo al final tendrá su resultado y es lo que a uno lo llena de satisfacción...