En un estadio Nagai convertido en el Monumental con miles de hinchas de River Plate, el campeón de la Libertadores se clasificó este miércoles para la final del Mundial de Clubes 2015 al ganar 1-0 al Sanfrecce Hiroshima, mientras que el América finalizó quinto al vencer 2-1 al Mazembe.
Ahora Los Millonarios jugarán el domingo en Yokohama con el vencedor del duelo del jueves entre el Barcelona y el Guangzhou Evergrande.
'Seguramente nos enfrentaremos al mejor equipo del mundo, es quizás el mejor de la historia. Es algo doble que tenemos para medirnos', dijo el capitán Marcelo Barovero.
Unos 15.000 aficionados de River recorrieron 18.000 kilómetros para dar todo el color a este Mundialito. Desde primera hora de la tarde llenaron las gradas del estadio Nagai con las banderas de las filiales que habitualmente decoran el Monumental.
'Pagamos la carga de ser el favorito, de jugar con toda nuestra gente pidiendo ir para adelante. Teníamos una enorme responsabilidad y superamos la ansiedad con inteligencia y paciencia', dijo el técnico de River Marcelo Gallardo.
- Alario, el héroe -
En un partido para olvidar, River Plate se llevó la victoria gracias a un gol del delantero Lucas Alario en el minuto 72.
'Sigo viviendo un sueño, desde el día en que me tocó jugar la Libertadores y ganarla. Ahora el Mundial de Clubes, siempre veía esta competición por la tele y hoy la viví desde dentro', dijo Alario, de 23 años.
En la previa se debatía cuál sería la condición ideal para llegar a la semifinal: El subidón emocional y castigo físico del Hiroshima, al encadenar tres victorias fundamentales en 10 días, o la interminable espera de River, sin competir desde el 27 de noviembre.
Se evidenció que a los japoneses les funcionaba rápido la cabeza y no les pesaban las piernas, mientras que los argentinos carecían de automatismos, oxidados en lo futbolístico.
'Debemos aceptar el resultado, sin embargo tuvimos chances de gol, tuvimos posibilidades de ganar', señaló Hajime Moriyasu, entrenador del equipo japonés.
Tras dominar en el arranque, Barovero se convirtió en un gigante para mantener con vida a River en 20 minutos de espanto, cuando realizó tres paradas sobresalientes.
El árbitro señaló el descanso y Gallardo resopló en el banquillo.
Finalmente en una falta llegó el gol argentino. Alario acertó de cabeza tras un primer toque también con la testa de Jonatan Maidana que había servido para salvar la salida del arquero.
Luego el Hiroshima acusó la paliza de la última semana y River tuvo el oficio para controlar el partido y alcanzar la final.
- Victoria amarga -
Antes el América cerró su participación en la competición con una victoria sobre el Mazembe que no sirve para olvidar la oportunidad perdida al haber caído (2-1) en cuartos ante el Guangzhou; jugar la semifinal ante el Barcelona de Messi.
Los jugadores dirigidos por Ignacio Ambriz comenzaron muy motivados y consiguieron hacer la diferencia en la primera media hora. El primer gol lo logró el argentino David Benedetto (19), que se lesionó al rematar, y el 2-0 lo firmó su sustituto Martín Zúñiga (28).
Por los africanos marcó el zambiano Rainford Kalaba al filo del descanso (43).
'El Mazembe fue difícil, me gustó, es rápido, juega con mucha intensidad en la recuperación de la pelota, velocidad para atacar y fortaleza', dijo Ambriz, que confirmó que seguiría al frente del equipo a pesar de no poder igualar el cuarto puesto logrado en el anterior Mundialito disputado por el América (2006).