Koeman dijo el viernes comprender por qué Messi se vio molesto cuando los periodistas le preguntaron sobre las críticas en su contra hechas por un exagente de su compañero Antoine Griezmann cuando el astro argentino llegó a España el miércoles después de un largo viaje.
“Tengo que defender a Leo, porque si a mí me pasara que después de un viaje de 15 horas en avión de regreso a Barcelona y tener que esperar una hora y después salir donde está la prensa haciendo ese tipo de preguntas, yo estaría igual de molesto con ellos”, destacó.
El técnico señaló que tras un largo viaje de regreso a Barcelona, es lógico que el jugador haya reaccionado con malestar ante ese tipo de preguntas de los medios justo a su llegada. Agregó que por lo que ha visto en los entrenamientos, no hay problemas entre Messi y Griezmann.
Eric Olhats, quien fue agente de Griezmann hasta 2016, dijo a la revista France Football la semana pasada que Messi ha marginalizado a Griezmann en lo que catalogó un “régimen de terror” en el club, donde el argentino presuntamente “controla todo”.
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Cuando los reporteros buscaron una reacción de Messi, él se limitó a responder: “La verdad ya estoy un poco cansado de ser siempre el problema de todo en el club”.
Eso generó nuevas alarmas en el Camp Nou sobre el futuro del delantero de 33 años.
Muchos están preocupados de que el más reciente episodio de malestar se convierta en otro motivo para que Messi siga adelante con sus planes de cambiar de equipo. Una vez que su contrato venza al final de la presente temporada, Messi tendrá la libertad para negociar con otros clubes a partir de enero. Se especula que estaría tentado a reunirse con su exentrenador Pep Guardiola en el Manchester City.
Koeman dijo que si bien cree que su trabajo no es convencer a Messi de quedarse, confía en el que el atacante extienda su permanencia de 20 años en el Barcelona.
El conjunto catalán visita al Atlético de Madrid, el único club invicto de la liga, el sábado.
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