TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Los hondureños enfrentan un futuro financiero incierto como resultado de la pandemia del coronavirus y se refleja en un crecimiento de los ahorros en el sistema financiero del país.
Los reportes del Banco Central de Honduras (BCH) detallan que los depósitos han tenido un crecimiento interanual de 20.3% y 14% solo en los meses de 2020 al 8 de octubre pasado.
El informe muestra que el sistema financiero mantiene recursos del sector privado por 362,466.9 millones de lempiras, una cifra mayor en 44,553.7 millones respecto a diciembre del 2019 y 61,244.4 en comparación con octubre.
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El saldo de los depósitos corresponde en un 57.2% a los hogares (207,215.4 millones), mientras que las empresas privadas tienen 155,251.5 millones de lempiras, que equivale al 42.8% del total.
Los factores
La acumulación de efectivo se debe en gran medida a la pandemia, ya que la situación ha hecho que las personas sean cautelosas sobre sus finanzas, prescindiendo de gastos e inversiones.
El BCH revela que las empresas privadas incrementaron sus depósitos en 29.9% y los hogares en 14%.
“El comportamiento en la captación de los hogares se asocia al menor gasto en recreación e inversión debido a las restricciones de circulación adoptadas por el gobierno para evitar el contagio del covid-19”, dice el reporte.
El economista Claudio Salgado explica que las restricciones para circular, la incertidumbre y el riesgo de contagio y de perder el empleo han frenado el consumo de las personas y las inversiones de las empresas.
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“La gente que tiene el dinero lo que está haciendo para una cuestión de prevención es ahorrar, la gente está viendo la importancia de tener un fondo de emergencia, afirmó Salgado.
Todo mundo conoce a alguien que ha perdido el trabajo o la han experimentado ellos mismos y por otro lado los hondureños han estado sobreviviendo con lo básico, comenta. En consecuencia, las empresas están postergando sus inversiones debido a la misma falta de consumo, además de lo incierto que se observa el panorama para los próximos meses por la pandemia que arrecia con una nueva oleada en Europa.
Lo anterior también explica un casi nulo crecimiento del crédito.