De acuerdo con los medios ingleses, Meghan y Harry contrataron una empresa para que se encargue de la búsqueda de la niñera.
La pareja estableció un salario anual de 80,000 dólares (1,956,800 lempiras al año), es decir 6,700 dólares al mes (unos 163,000 lempiras).
Un sueldo bastante tentador tomando en cuenta de que el salario mínimo en Inglaterra es de 1,800 dólares.
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Las condiciones que puso Meghan fueron, para muchos expertos de la realeza, poco protocolares. Una de las reglas más fuera de lo común fue que no es necesario que sea de origen inglés.
Discreción absoluta y perfil bajo. “Que no se deje deslumbrar por la fama”, precisa el anuncio de empleo. Se aceptan postulantes hombres.
También debe tener disponibilidad de tiempo completo y posibilidad de viajar al extranjero.
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