Tegucigalpa, Honduras
La Escuela Nacional de Bellas Artes (ENBA) realizó una edición más de su programa “Enseñarte Honduras”, que consiste en mostrar el trabajo artístico de las carreras que se imparten en dicho centro educativo.
La actividad estuvo a cargo de los estudiantes de décimo y onceavo grado de la institución y se desarrolló en la Plaza Francisco Morazán, de Tegucigalpa, donde el público capitalino se hizo presente para apreciar los trabajos de los jóvenes.
“El objetivo de ‘Enseñarte Honduras’ es que la gente pueda conocer lo que hacemos en Bellas Artes, y a la vez invitar a los muchachos a que se animen a ingresar a la escuela”, dijo la docente encargada del evento, Gladis Escoto.
Por tal razón, la institución brindó al público la oportunidad de ver las creaciones de sus estudiantes en pintura, cerámica, terracota, madera, grabado, fotografía y otras técnicas propias de las artes plásticas y visuales, contribuyendo de esta forma a crear sensibilidad artística en la comunidad, a través de la interacción con los nuevos artistas.
La exposición contó con el montaje de diversas obras finalizadas y otras en proceso, para que los protagonistas de la actividad compartieran el proceso de elaboración con niños deseosos de aprender las diferentes técnicas y comenzar sus propios proyectos.
“Esto es como sacar el aula de clase a las calles para hacer una demostración del talento artístico que hay en el país y, sobre todo, del ingenio de nuestros alumnos de Bellas Artes, quienes guiados por sus maestros lograrán convertirse en profesionales de cada una de estas áreas”, expresó Escoto.
En una Honduras que se debate en su peor crisis de identidad, el arte es vital para reedificar la memoria cultural, y en ese sentido, la ENBA está cumpliendo su misión.
La Escuela Nacional de Bellas Artes (ENBA) realizó una edición más de su programa “Enseñarte Honduras”, que consiste en mostrar el trabajo artístico de las carreras que se imparten en dicho centro educativo.
La actividad estuvo a cargo de los estudiantes de décimo y onceavo grado de la institución y se desarrolló en la Plaza Francisco Morazán, de Tegucigalpa, donde el público capitalino se hizo presente para apreciar los trabajos de los jóvenes.
“El objetivo de ‘Enseñarte Honduras’ es que la gente pueda conocer lo que hacemos en Bellas Artes, y a la vez invitar a los muchachos a que se animen a ingresar a la escuela”, dijo la docente encargada del evento, Gladis Escoto.
Por tal razón, la institución brindó al público la oportunidad de ver las creaciones de sus estudiantes en pintura, cerámica, terracota, madera, grabado, fotografía y otras técnicas propias de las artes plásticas y visuales, contribuyendo de esta forma a crear sensibilidad artística en la comunidad, a través de la interacción con los nuevos artistas.
La exposición contó con el montaje de diversas obras finalizadas y otras en proceso, para que los protagonistas de la actividad compartieran el proceso de elaboración con niños deseosos de aprender las diferentes técnicas y comenzar sus propios proyectos.
“Esto es como sacar el aula de clase a las calles para hacer una demostración del talento artístico que hay en el país y, sobre todo, del ingenio de nuestros alumnos de Bellas Artes, quienes guiados por sus maestros lograrán convertirse en profesionales de cada una de estas áreas”, expresó Escoto.
En una Honduras que se debate en su peor crisis de identidad, el arte es vital para reedificar la memoria cultural, y en ese sentido, la ENBA está cumpliendo su misión.
