Moscú, Rusia
Rusia está 'totalmente preparada' para acoger el Mundial de fútbol (14 junio-15 julio), afirmó este jueves el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, agradeciendo al presidente ruso, Vladimir Putin, los esfuerzos realizados por el país anfitrión.
'Estáis trabajando para hacer de este Mundial el mejor Mundial de la historia', declaró Infantino en un encuentro con el dirigente ruso en Sochi, a orillas del mar Negro.
'Los comentarios de nuestros expertos de la FIFA son extremadamente positivos', añadió, estimando que 'esto prueba que Rusia está totalmente preparada para recibir al mundo y celebrar un verano de celebraciones aquí, en este bello país'.
Infantino subrayó 'el nivel único de implicación, esfuerzo y profesionalidad' de Rusia para buscar el éxito del evento.
Putin, por su parte, prometió brindar 'un campeonato del más alto nivel'.
'Todos esperamos que nuestros jugadores se impliquen en el juego, lo den todo, jueguen al máximo de su potencial', declaró, abogando por 'un fútbol sin compromiso, el que los hinchas quieren'.
Putin e Infantino visitaron luego el estadio de Sochi, ciudad anfitriona de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2014 y que el presidente de Rusia se ha propuesto convertir en una de las capitales mundiales del deporte.
Por primera vez en la historia, Rusia organiza el Mundial de fútbol, con unos medios impresionantes y unos desafíos también colosales, como la lucha contra los 'hooligans' y el racismo, o incluso la amenaza de atentados ampliada por la intervención militar rusa en Siria.
Los partidos se organizan en doce estadios y once ciudades, que van desde Kaliningrado, ciudad en un enclave ruso en el mar Báltico limítrofe con Polonia, hasta Ekaterimburgo, en los Urales.
Rusia está 'totalmente preparada' para acoger el Mundial de fútbol (14 junio-15 julio), afirmó este jueves el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, agradeciendo al presidente ruso, Vladimir Putin, los esfuerzos realizados por el país anfitrión.
'Estáis trabajando para hacer de este Mundial el mejor Mundial de la historia', declaró Infantino en un encuentro con el dirigente ruso en Sochi, a orillas del mar Negro.
'Los comentarios de nuestros expertos de la FIFA son extremadamente positivos', añadió, estimando que 'esto prueba que Rusia está totalmente preparada para recibir al mundo y celebrar un verano de celebraciones aquí, en este bello país'.
Infantino subrayó 'el nivel único de implicación, esfuerzo y profesionalidad' de Rusia para buscar el éxito del evento.
Putin, por su parte, prometió brindar 'un campeonato del más alto nivel'.
'Todos esperamos que nuestros jugadores se impliquen en el juego, lo den todo, jueguen al máximo de su potencial', declaró, abogando por 'un fútbol sin compromiso, el que los hinchas quieren'.
Putin e Infantino visitaron luego el estadio de Sochi, ciudad anfitriona de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2014 y que el presidente de Rusia se ha propuesto convertir en una de las capitales mundiales del deporte.
Por primera vez en la historia, Rusia organiza el Mundial de fútbol, con unos medios impresionantes y unos desafíos también colosales, como la lucha contra los 'hooligans' y el racismo, o incluso la amenaza de atentados ampliada por la intervención militar rusa en Siria.
Los partidos se organizan en doce estadios y once ciudades, que van desde Kaliningrado, ciudad en un enclave ruso en el mar Báltico limítrofe con Polonia, hasta Ekaterimburgo, en los Urales.