DANLÍ, HONDURAS.-La instalación de puestos de venta ambulante están prohibidas en la ciudad de Danlí a partir de la fecha.
Los improvisados negocios ubicados en las aceras, bulevares y plazas de la localidad deberán desalojar cuanto antes y permitir la recuperación de dichos espacios.
Ordenanza
La medida fue aprovada por la corporación municipal en pleno y ratificada a través de una ordenanza municipal, la cual tiene vigencia inmediata.
Aníbal Valladares, director de justicia municipal en Danlí, explicó que la medida es permanente y se mantendrá vigente hasta en aquellos períodos festivos que se realizan en el poblado.
“La ordenanza es general, por lo que ninguna persona podrá instalarse en espacios públicos de la ciudad a comercializar sus productos” aseguró el funcionario.
Valladares explicó que las personas que se dedican a distribuir productos en los diferentes comercios ya establecidos, tendrán un lapso de tiempo para realizar su recorrido y luego tendrán que marcharse ya que la venta a particulares está prohibida.
“Los comerciantes que incumplan la ordenanza se les decomisará el producto y están sujetos a otro tipo de sanciones”, advirtió el entrevistado.
Pese a que la municipalidad no maneja un dato exacto sobre la cantidad de personas que ejercen comercio informal en la comunidad, se han identificado sectores como la Plaza San Sebastián, el bulevar La Democracia y el Cementerio General como los sectores más afectados por la venta móvil de productos.
“Vendrán más ordenanzas y la aplicación de otras estrategias, como la reubicación de vendedores, para lograr crear un orden en la ciudad en cuanto al tema de vendedores ambulantes”, anunció el jefe de justicia municipal en Danlí.
Las constantes denuncias ciudadanas sobre la falta de espacios para desplazarse por las calles de la Ciudad de las Colinas, así como el descontrol en el manejo de los desechos sólidos, obligaron a las autoridades locales a tomar dichas medidas y tratar de controlar el creciente número de vendedores ambulantes que se dispara en estas fechas de Navidad y fin de año.
La temporada de corta de café y las ferias propias de la localidad, anualmente, motivan la llegada de cientos de comerciantes nacionales y extranjeros, aumentando aún más el problema de ventas móviles en la localidad.
