El flash de la cámara se hace presente cada 2 minutos mientras empieza a recordar parte de su transición que lo ha llevado a lograr el nivel que ha alcanzado a los 24 años.
Con su voz suave y clara, detalló el vendaval de emociones que causó el cambio abrupto de una ciudad a otra (de San Pedro Sula a Tegucigalpa), dejando su hogar, sus amigos, sus recuerdos, su vida.
Muchas decisiones estaban sobre la mesa, entre ellas seguir el legado de un ingeniero electricista, pero el cambio era inminente, las expectativas cambian y la inclinación por las ciencias económicas se volvió en un hecho pese a lo que pensaran sus padres.
“Yo me matriculé en economía a escondidas de mis papás. La decisión la tomé antes de inscribirme en la universidad y hasta el segundo año confirmé que estaba estudiando una licenciatura en economía. Fue de las mejores decisiones que he tomado en la vida”, destacó.
Aunque sus dos primeros años fueron duros, Alejandro logró adaptarse totalmente a Tegucigalpa y -como buen sampedrano amante del fútbol- comenzó a ser parte del equipo de la Facultad de Economía, pero los inconvenientes suelen presentarse y más si existe una pasión de por medio. En la cancha se deja todo y en esta ocasión los golpes van incluidos.
'En esas calenturas del juego me lastimé el tobillo y me disloqué los dos hombros, estoy remendado de todos lados”, afirmó.
Entrada en el Fosdeh
Después de lo vivido y dejando en segundo plano su posición como arquero, los nuevos aires de formalidad llegan al entrar en 2018 al Foro Social de Deuda Externa y Desarrollo de Honduras ( Fosdeh).Más que su lugar de práctica, Fosdeh se convierte en la institución que le da la bienvenida como consultor y es así como el panorama empieza a cambiar en la vida de aquel sampedrano que en su momento odiaba la idea del cambio.
Luego de empezar a desarrollarse formalmente como economista y ya con su título, la vida le asesta un duro golpe en el 2019. Perder a un ser querido es una de las pruebas más difíciles.
Alejandro recuerda con gran cariño y nostalgia al ex subcoordinador del Fosdeh, Raf Flores, quien en vida apostó totalmente por él, guiándolo tanto en lo profesional como en lo personal.
“Muchos de los que estamos en el Fosdeh fuimos de las ultimas apuestas que él hizo para la institución y el país, ha sido una escuela para cualquier persona que entra”, señaló.
Su agenda como economista siempre pasa llena. Con el paso de la entrevista, el constante “beep” de las notificaciones de su móvil se hace presente, pero siempre concentrado en la entrevista.
Alejandra relaja sus apariciones como uno de los fundadores de la Coalición por la Renovación de la Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (Maccih), organismo que acabó a principios de 2020.
“Estuvimos una semana reunidos en Washington para tratar el tema de renovación de la Maccih y el tema de anticorrupción, nunca esperé reunirme con el secretario del departamento de Estado en Estados Unidos”, relató.
Además, este joven economista no solo es partícipe de escenarios guiados a ciertos sectores de la sociedad civil, también es parte de la creación de espacios para que los jóvenes puedan informarse y ser parte de ello.
Al estilo de un foro entre cervezas y con temas de alto impacto es que nace la idea de “Quemando Micrófonos”, un formato que ha venido a revolucionar el discurso en la juventud.
“Siempre se me dio la facilidad de hablar en público y ser bastante claro en algunas cosas, esto me ha permitido facilitar mis opiniones, hay algo que me molesta y trato de no hacer y son los ataques personales. Se cae muchas veces en cuestionar más a la persona que a las ideas y yo siento que por amor a la ciencia uno tiene que debatir ideas y no personas”, añadió.
Alejandro muestra su total preocupación por la juventud al recalcar que la persistencia es el principal motor para lograr las metas y que nuca se debe poner como barrera la edad. Esto es otro reflejo de las grandes facultades que tiene y que el camino por recorrer es duro pero firme.
Con gran carisma mencionó que sigue gestionando su entrada a la Universidad de Costa Rica. El cambio cultural es aún mayor, pero el joven que en algún momento reflejó una rebeldía por su amor a la economía se ve en la situación de repetir los patrones que le dejaron un sabor agridulce, en esta ocasión, es un todo o nada.
1️⃣ Los indicadores de vulnerabilidad de la deuda permiten determinar la sostenibilidad de la deuda pública para una economía, país o región y así determinar que volumen de la deuda puede sostenerse sin problemas económicos para un gobierno.
— Alejandro Kaffati (@KafatiAlejandro) October 11, 2020