Rafael Ferrari Sagastume falleció este miércoles de un paro cardíaco mientras viajaba a Estados Unidos, pero deja un enorme legado entre los hondureños y los medios de comunicación.
Desde su primer trabajo hasta su primer proyecto en el deporte, el magnate dejó todo por los medios de comunicación y su pasión: El Club Deportivo Olimpia.
Sus estudios secundarios los realizó en el Central Vicente Cáceres y posteriormente en la Universidad del Sur de California.
El magnate empresario comenzó su trayectoria como gerente general HRN cuando tomó el control del negocio familiar en 1957.
Permaneció en ese puesto hasta 1965 cuando pasó a ser gerente general de la Compañía Televisora Hondureña S.A., Canal 5.
En 1987 fundó Televicentro con la idea de unificar los los canales 3/7, 5 y 7/4, lo que le permitió ampliar la cobertura de esos canales construyendo repetidoras en distintos puntos del país.
Desde entonces Ferrari se convirtió en uno de los propietarios de medios de comunicación social de mayor referencia en Honduras y Centroamérica.
“Constituirse en empresario de la comunicación es una tarea difícil porque se llega a diferentes sectores con diversidad de pensamiento”, destacó el hondureño en una entrevista con EL HERALDO .
El “Señor Ferrari”, como le decían respetuosamente sus colaboradores, también obtuvo reconocimientos como el Gran Caballero Hoja de Liquidámbar (1992), Gran Cruz Placa de Oro, otorgado por el Congreso Nacional de Honduras y premio Trayectoria Empresarial concedido por Televisa en México.
En 1984 organizó el evento de amor y caridad más grande de Honduras: la Teletón, que precisamente se había celebrado en 2018 cinco días antes de su deceso.
En los ochentas se convirtió en presidente del Club Deportivo Olimpia, título que conservó hasta su muerte.
