TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Desde la semana pasada, la Asociación Nacional de Enfermeras y Enfermeros Auxiliares de Honduras (ANEEAH), advirtió que llevarían acabo asambleas informativas por masivos despidos.
Pese a que el país se enfrenta a una emergencia sanitaria por dengue, la ministra de Salud, Carla Paredes, hizo caso omiso a las amenazas de la ANEEAH. Hoy, los más afectados son los pacientes, quienes se encuentran sin atención médica en aproximadamente siete departamentos del país.
“Insultaron a un gremio que es pacífico y que por las buenas sabemos dar amor, pero si somos tratados por las malas demostramos que no somos más del montón”, reprochó Josué Orellana, presidente de la ANEEAH.
La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) cuestionó la poca importancia que la ministra de la Secretaría de Salud le dio al gremio.
“La ministra de Salud tiene que tener una agenda para resolver este tipo de conflictos, dialogando, resolviendo, buscando las soluciones para que el personal este en condiciones optimas para atender a los pacientes”, enfatizó Blanca Munguia, directora de Salud de la ASJ.
La sociedad civil cuestionó la actuación de Paredes. Munguia señaló que la funcionaria tuvo el tiempo necesario para prevenir y atender el llamado del personal de Salud y así evitar la crisis actual.
“No hizo caso al llamado de alerta, incluso ellos advirtieron que no querían llegar a estas instancias, la ministra ha reaccionado tarde” lamentó Munguia.
Agregó que Paredes debe ver el personal de salud como su principal aliado. Hasta el cierre de esta se conoció que Paredes convocó a reunión a los afectados, sin embargo, hasta el cierre de esta edición no se conoció si se llegó a un acuerdo y se suspendieron las asambleas programadas por ANEEAH .
