TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Dar el último adiós a quién se convirtió en el fiel compañero de horas de juegos, mimos y eternos recuerdos puede generar en el corazón una profunda y sincera pena.
Sus coloridas plumas o su fría nariz, incluso la gracia de su crin al cabalgar, solo quedarán plasmadas como huellas en el corazón, tanto de niños como de adultos.
Para calmar la angustia de la partida sin retorno es que hace tres meses nace la idea de ofrecer a los dolientes cajas fúnebres para mascotas.
Esta especie de aliciente es abanderado por los emprendedores del taller Ataúdes Josué 1:9, ubicado en la colonia Lomas del Norte de Comayagüela.
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Alexander Rodríguez, representante de esta funeraria, explicó que las personas que compran un ataúd para su mascota sienten una especie de alivio.
“Nosotros queremos darle vuelta a esa situación de tristeza, confeccionando productos de buena calidad a un precio justo y sobre todo con un trato esmerado, porque le atendemos directamente los socios de la empresa, es decir que es una atención personalizada”, dijo Rodríguez.
Cada uno de los productos tienen finos acabados y detalles que hacen recordar con alegría a quienes de manera incondicional nos regalaron tiernas e incondicionales miradas.
Innovación
Rodríguez comentó que pensaron en los animales porque es algo que no se había elaborado en el país.
Al ver que hacía falta la venta de este tipo de productos es que nace este grupo de emprendedores que lanzan la innovadora idea que poco a poco tiene aceptación entre los hondureños.
La atención para los clientes que deseen un ataúd para su fiel amigo es las 24 horas del día, pues en algunos casos los clientes dicen que tienen una emergencia.
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“A mí me llaman para preguntarme hasta por ataúdes para caballos, para iguanas, pero hacer uno para caballo sería algo raro por el tamaño, pero se puede hacer”, explicó el emprendedor.
En el taller se elaboran ataú des para perros, gatos y pájaros. Pero en un futuro no muy lejano se van a fabricar cajas para mapaches, búhos, iguanas, tortugas y ratones.
Consternación
Algunos clientes al llegar a la sala de exhibición de ataúdes no pueden contener la tristeza por la partida de su mascota, ya sea por vejez, enfermedad o accidente.
“Muchos llegan llorando en busca de un ataúd porque se les ha muerto su perro, su gato o su perico, pues en la mayoría de los casos estos animales son los que llegan a su encuentro cuando el amo entra a la casa”, dijo el experto del negocio fúnebre.
“Hay personas que son dueños de perros que lloran cuando nos llaman para cotizar cuánto vale un ataúd, pues estos animales se convierten en parte de la familia”, reiteró Rodríguez.
¿Cómo adquirirlos?
Los pedidos de la morada eterna para mascotas se pueden hacer de manera directa en el taller o a través de las redes sociales de la empresa.
En el taller, el personal está dispuesto a trabajar los siete días de la semana para dar consuelo a su dolor.
En la actualidad, los ataúdes para mascotas son de la línea de lujo y los precios son accesibles al bolsillo del doliente.
Para elaborar una caja fúnebre para mascotas al cliente se le solicita las medidas del animal, pues algunos son más grandes que otros, eso dependiendo de la raza o el cuidado que se les haya dado en vida.
Otro de los factores importantes es la posición en la que haya quedado la mascota al momento de morir, pues en el caso de los perros, casi siempre quedan con las patas estiradas, por lo que se debe tener mayor espacio para que queden bien acomodados.
El tamaño grande para un amigo de cuatro patas como un perro es de L 1,500 y para un travieso gato es de L 1,200.
Para las aves, que con su canto alegraban las mañanas, el precio de una caja de descanso eterno es de L 500.
Sí su bolsillo todavía no se ajusta a estos precios, hay buenas noticias. Para los próximos meses se comenzarán a producir ataúdes de línea económica para que las personas puedan
adquirir estos productos fúnebres entre los L 500 y L 600, en el caso de que sea para un perro. Todos los productos se elaboran en el mismo lugar.
El trabajo de realizar estas cajas de consuelo recae en un grupo de nueve carpinteros que se esmeran para dar lo mejor de sí a los clientes, pues saben que con el trabajo de sus manos aliviarán la pérdida de un fiel amigo.
En el interior de las cajas se les coloca finas telas de seda, para albergar a un ser querido que se va a enterrar con todos los honores por parte de sus familiares.
Algunas personas solicitan que se les coloque una fotografía de un inolvidable momento, otros piden que se les coloque un mensaje, ya sea en el interior o en el exterior del ataúd.
Especialistas
Lo que Alexander Rodríguez anhela es que a futuro haya salas para velar mascotas y un cementerio, pues en la actualidad los animales son enterrados en los solares de las viviendas o en zonas alejadas de los amos.
En las calles y avenidas es normal ver animales que han perdido la vida y nadie se preocupa por levantarlos ni mucho menos piensan en enterrarlos en algún lugar.
Es por eso que algunas organizaciones que se dedican a la defensa de los animales se preocupan por dar calidad de vida a las mascotas y pretenden que de ahora en adelante se les dé una despedida digna, pues han sido parte de la familia al convivir en el hogar, donde han sido muy queridos, ya que se les da hasta de la misma comida con las que se alimentan sus amos.
Incluso hay personas que durante la vida de sus animales invierten significativas cantidades de dinero para su mantenimiento. Por ejemplo, los llevan a salones de belleza, clínicas veterinarias especializadas en su raza y hasta los visten con prendas de última moda. Por lo que al momento de su muerte esta es una manera de brindar una última caricia de amor a su sincero amigo.
Y es que cuando un amigo parte de este mundo, el vacío puede ser apaciguado con un entierro digno. Para cotizar un ataúd puede llamar al teléfono 9596-3352 o al 2201-4753.