Dos exdirigentes disidentes del Movimiento Unificado Campesino del Aguán (MUCA) denunciaron ayer que son víctimas de persecución por parte de los directivos de esa organización.
Carlos Gómez, que perteneció al asentamiento La Confianza, pidió apoyo al gobierno de Juan Orlando Hernández porque ya no aguanta tanta persecución.
“Siempre hemos tenido temor desde que salimos de la zona, nos dimos cuenta de todas las fechorías que se estaban dando por los mismos compañeros, siempre hemos tenido temor y aún hoy más porque lo hemos denunciado públicamente”, dijo Gómez.
Por su parte, Reyna Munguía, se sumó a las críticas de Gómez. “A mi esposo lo asesinaron hace casi tres años. Él desaparece el 11 de marzo de 2012 y hasta el día de hoy no sé qué pasó, dónde quedó el cuerpo. Yo le pido a las autoridades nacionales e internacionales que nos den el apoyo necesario y que se investigue más lo que está pasando en el Bajo Aguán, porque esto es una barbarie, ya estamos cansados de seguirnos escondiendo, de seguir atemorizados, que nos persigan, ya queremos justicia”, dijo.
Mientras, en otro lugar, la Plataforma Agraria Regional del Valle del Aguán denunció la impunidad que impera tras la muerte de 113 campesinos en el gobierno de Porfirio Lobo.
“Hay 400 niños huérfanos, madres viudas, hombres y mujeres heridos”.