TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La crisis que envuelve al Hospital San Felipe, uno de los centros asistenciales más emblemáticos del país, no se limita solo a la deficiente atención médica y la escasez de medicamentos, sino que ahora enfrenta una nueva polémica tras las revelaciones del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) sobre actos de corrupción que empañan su integridad.
El CNA, en una reciente investigación, expuso la falta de transparencia en la administración del hospital, vinculando esta crisis a manejos irregulares en la gestión de los recursos.
Según el organismo, exautoridades del centro asistencial, incluyendo al exdirector Carlos Murillo, estuvieron involucradas en prácticas corruptas.
Gabriela Castellanos, directora del CNA, detalló que la investigación se centró en tres procesos de contratación directa y una licitación privada realizados en 2023.
“El virus de la corrupción se esparce por las paredes de uno de los hospitales más longevos del país, el Hospital San Felipe”, afirmó Castellanos.
Durante su exposición, Castellanos hizo hincapié en que la Secretaría de Salud ha sido históricamente una “gallinita de los huevos de oro”, donde los procesos de contratación y licitación reservados se convierten en terreno fértil para la corrupción.
“En la mayoría de las compras directas, estas se usan como mecanismos para favorecer a proveedores allegados a las autoridades, sin pasar por un proceso de calidad”, enfatizó.
La investigación reveló que en las compras directas 01-2023, 09-2023, 10-2023, y en la licitación privada 02-2023, se adquirieron bienes y servicios a través de una empresa mercantil sin cumplir con los trámites legales correspondientes.
“A puertas cerradas, pero con las arcas abiertas, identificamos un perjuicio que atenta contra el adecuado funcionamiento de la administración pública”, denunció Castellanos.
El CNA también informó que el monto del acto de corrupción asciende a más de 14 millones de lempiras, con facturas revisadas que no detallaban los servicios brindados al hospital, evidenciando una falta de control y supervisión en las contrataciones.
Cabe destacar que la semana pasada, la Secretaría de Salud reaccionó a la crisis enviando una junta interventora al Hospital San Felipe, compuesta por cuatro miembros que brindarán apoyo en las áreas de compras y administración.
