La Secretaría de Educación planea contratar un fideicomiso con la banca privada para pagar los sueldos de los maestros a partir del próximo año y evitar que estos vayan a paros por retrasos en las transferencias.
“La idea es que en 2013 los pagos de salarios se hagan mediante fideicomiso”, dijo el ministro del ramo, Marlon Escoto. Mediante el fideicomiso, el banco pagará los sueldos de los educadores y personal no docente independientemente de si el Estado tiene o no los recursos suficientes.
“El banco podría cubrir el pago aun cuando el Estado no le haya pagado todo el valor”, explicó el funcionario.
Por su lado, el Poder Ejecutivo deberá hacer transferencias periódicas a la cuenta del fideicomiso, aunque estas no cubran el monto de la planilla, para que el banco la administre.
Al final de cuentas, el contratante -gobierno- tendrá que haber hecho el traspaso de recursos por el valor cancelado por el banco, más los intereses por el servicio, según se fije en el contrato que se firme.
“El Estado tendría una sola obligación con el banco del fideicomiso, no con decenas de instituciones”, remarcó el funcionario.
La Secretaría de Educación destina unos 14 mil millones de lempiras para el pago de salarios a los maestros, los cuales no tienen ningún retorno para el erario en vista de que los docentes gozan del privilegio de exoneración de impuestos.
El Estatuto del Docente concede este beneficio fiscal a los maestros, una gracia que ningún obrero tiene en el país.
Cero huelgas
El ministro Escoto dijo que al garantizarse el pago de los maestros de forma puntual estos no tendrán excusas con fundamento para irse a los paros de labores.
No obstante, Escoto consideró que los maestros siempre tendrían otros temas en agenda aparte del aspecto salarial por los que convocarían a huelgas.
En ese sentido, consideró que el sistema educativo requiere de reformas más profundas para blindarlo de la anarquía en la que ha permanecido.
Escoto reiteró a la dirigencia magisterial que existe un decreto ejecutivo que prohíbe el cierre o toma de instituciones educativas, so pena de sanciones graves.
Según organizaciones de padres de familia, se han perdido unos 30 días de clases producto de las constantes huelgas de los maestros, por lo que se ha visto afectado el calendario lectivo que establece 200 días de clases.
La Secretaría de Educación amplió hasta el 21 de diciembre el año escolar, aunque los gremios magisteriales aseguran que el periodo de clases terminará el 31 de noviembre como estaba contemplado.
Los maestros aseguran que solo se ha perdido una semana de clases y que la misma ya se recuperó.
¿Habrá dinero?
Por su lado, el presidente del Colegio de Pedagogos de Honduras (Colpedagogosh), Joel Espinal, dijo que más que un fideicomiso para cancelar los salarios lo que se requiere es que el gobierno tenga recursos disponibles para transferirlos al banco, porque de lo contrario siempre habrá retrasos.
“Si el gobierno no tiene dinero para pagarle al banco, entonces el banco no nos va a pagar a nosotros porque dirá que el gobierno no les ha hecho la transferencia”, expuso el dirigente magisterial.
Aclaró que no está en contra de un nuevo sistema de pago, sino que mantiene sus reservas sobre ello porque el gobierno siempre ha tenido problemas de liquidez y para el próximo año “las finanzas del Estado estarán mucho peor”.
Mientras, el gobierno reanudará este lunes el diálogo con el sector magisterial para discutir varias exigencias de los docentes.
El reinicio de las pláticas se produce luego de que el presidente Porfirio Lobo asegurara que no habría conversaciones producto de que los maestros suspendieron clases.
Formalizan invitación a relator de la ONU
El ministro de Educación, Marlon Escoto, confirmó que se giró una invitación formal a un relator especializado en educación de las Naciones Unidas para que observe el grado de perjuicio que las huelgas de maestros han ocasionado a los alumnos.
“Las cartas de invitación al relator en educación de la ONU ya se han enviado”, dijo Escoto.
El requerimiento ante la ONU se hizo en vista de los constantes paros de labores en el sistema educativo nacional.
La mayoría de los paros educativos quedan impunes y los docentes terminan obteniendo sus peticiones, en su mayoría de orden salarial.
Educación también hizo una invitación a un delegado de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) a fin de que constate si han existido violaciones a los derechos laborales de los maestros. Todavía no se sabe en qué momento la ONU y la OIT responderán a las invitaciones del gobierno hondureño.