El exgerente de la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel) Marcelo Chimirri denunció este lunes que desde el Estado atentarán contra su vida, pero negó que se trate de persecusión política.
'Yo voy a ser objeto de un asesinato, el gobierno de la República, el Estado, quieren asesinarme', dijo visiblemente emocionado, en una entrevista telefónica a la emisora local Radio América.
Chimirri negó que se trate de persecución política, pero reiteró que desde el Estado van a asesinarlo, aunque ya le han quitado todo.
Cuestionó las razones por las que allanaron dos veces su vivienda, asegurando que ni la DEA realiza este tipo de acciones, pero lo hicieron para ver qué encontraban en una segunda vez.
'Ando deambulando por las calles, viviendo de la caridad de mis amigos, con dos criaturas, estamos en la calle, han cumplido con lo que han querido', se quejó.
También criticó 'el revanchismo y la saña' que han tenido con su esposa que ha pasado 72 horas en una celda, sin que se le permita recibir visita, porque ella nunca ha sido funcionaria y se dedica a cuidar de su hogar.
Agregó que tan siquiera les hubieran permitido seguir habitando en la casa, pero 'ni sacar un cepillo de dientes, ni la leche de las niñas, ni ropa, estamos en la calle'.
En ese sentido se preguntó dónde está el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) o la ministra de Justicia y Derechos Humanos Ana Pineda, porque el Estado le ha violentado todos sus derechos, incluso a defenderse.
'No tengo ningún derecho, para el Estado no soy humano, mis hijas no son menores de edad, mi esposa no tiene derechos, no somos nada' y alertó que esto le puede ocurrir a cualquier persona, porque al Estado no le interesan las personas.
Sobre las propiedades allanadas
se defendió diciendo que una de las casas perteneció a sus padres y la otra es fruto de su trabajo de 30 años, al tiempo que afirmó que continúa pagando.
Por otro lado, expresó que todos los bienes que posee son producto de los diversos negocios en los que ha estado involucrado, como centros educativos, empresas de televisión por cable y de transporte, entre otras.
'¿Cuál es el enriquecimiento ílicito? Dijeron que era una gran propiedad y sólo es media manzana y que tenía equipo de telecomunicaciones, pero es una antena para recibir señal de televisión que se puede encontrar por 100 dólares en cualquier lugar'.
De acuerdo a Chimirri, su gran error fue aceptar un cargo público e ironizó que se haga una investigación por una fiesta
para celebrar que fue declarado inocente de cargos de corrupción, en la que supuestamente participó personal del Poder Judicial, como trascendió este día.
El exfuncionario dijo que él es un chivo expiatorio en el caso de Latinode, porque las personas que otorgaron los permisos y arreglaron los documentos continúan dirigiendo Hondutel.
Cuando se le preguntó si eran los miembros de la comisión interventora en Hondutel, rehusó decir nombres, pero afirmó que están en los expedientes del caso que llevan los entes judiciales.
Chimirri dijo que no pedirá protección al Estado, porque 'son los mismos que me quieren arruinar', pero que se presentará voluntariamente ante la justicia que hasta el momento no ha probado nada en su contra.