La medida de aislamiento en albergues destinados en cada ciudad fue ordenada por el Gobierno para todos aquellos compatriotas que ingresen vía terrestre, marítima o aérea.
Aunque no todos se negaron a ser trasladados a los centros de aislamiento, la mayoría prefirió ser detenida y movilizada hasta una posta policial de San Pedro Sula.
Los que lograron huir de las autoridades caminaron rumbo a sus viviendas, con la esperanza de ingresar a pesar de los estrictos controles.
Los hondureños argumentaron que están cansados y aseguraron 'estar libres del virus', después de someterse a chequeos tres veces al día en Estados Unidos.
+Más noticias del coronavirus aquí
'Venimos limpios, nos chequeaban tres veces por día, todos los días. No es justo', dijo un hondureño a un canal local.
Otro, identificado como Edwin Argueta, manifestó: 'Yo soy de Marcala y me traer a dormir como si fuera ilegal en mi país, no es justo. Venimos cansados. Queremos llegar a nuestra casita'.
Un total de 92 connacionales llegaron al Aeropuerto Ramón Villeda Morales en una aeronave matrícula N803TJ. Todos fueron atendidos siguiendo los protocolos de seguridad establecidos para la llegada de viajeros en vista a la pandemia que tiene al mundo en vilo.
VEA: Transportistas se unen para trasladar gratuitamente al personal médico