Los hechos violentos que se registraron esta semana en la ciudad de Danlí mantiene estupefactos a los pobladores de todo El Paraíso.
Y es que hace unos años no se daban actos violentos con tanta saña como la masacre de dos féminas y un taxista cerca del centro penal o el desmembramiento de una menor de 16 años en Trojes.
Los empresarios y los paraiseños culpan del incremento violento al funcionamiento de La Tolva o El Pozo II.
Los hechos no solo causan preocupación entre la población, también en las autoridades locales, especialmente de Danlí, Trojes, El Paraíso, Teupasenti y Morocelí, que es donde se registra la mayor cantidad de homicidios en lo que va del año.
Según datos del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) en los primeros seis meses se han registrado 65 homicidios en todo el departamento.
En el mismo período de 2016, la cifra de muertes fue de 107 y de 129 en 2017. Este año marca una reducción del 50%, pero son los macabros hechos los que hacen sentir más la inseguridad en la zona históricamente tranquila.
Más afectados
El informe revela que las víctimas han sido en un 93% hombres con 59 decesos contra seis mujeres asesinadas.
Otro apartado del informe proporcionado a EL HERALDO establece que el móvil de las muertes en la mayoría de los casos ha sido por riñas interpersonales, pues se contabilizan 17 casos; por ajuste de cuentas 15 casos y por robo o tentativa, siete casos.
La vía pública es el lugar donde se cometen más hechos, se contabilizan 42 muertes.
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El Pozo II aumenta temor
Migdonia Ayestas, directora del Observatorio de la Violencia, reconoció que el centro penal El Pozo II en Morocelí ha contribuido a que se incrementen las muertes violentas en este municipio.
“Eso se debe a la llegada de integrantes de maras y pandillas, pues la zona se vuelve insegura y eso afecta a la ciudadanía que ha vivido en paz”, detalló Ayestas.
En cuanto al municipio de Trojes, mencionó que está entre los más violentos debido a que está ubicado en la zona fronteriza y “hay muchos puntos ciegos” y eso aumenta la violencia.
El edil de Danlí, Gustavo Mendoza, informó que se han reunido con los cuerpos de seguridad del estado para crear un plan urgente de protección ciudadana. “Se ha venido gente ajena a causar daños a nuestro departamento”, denunció.
