CEDEÑO, HONDURAS.-El Comité de Emergencia Local (Codel) de Cedeño mantiene vigilancia permanente del comportamiento del mar en toda la costa del Golfo de Fonseca.
El alto oleaje que se comenzó a reportar desde la tarde del martes en la comunidad, ha aumentado la preocupación de los habitantes de la zona por las aguas estancadas y daños estructurales que se puedan reportar.
“Nos mantenemos al pendiente de lo que pueda suceder, esperamos que no sea tan fuerte como en otras ocasiones”, dijo Dagoberto Majano, presidente del Codel.
El fenómeno natural también influye negativamente en el turismo, ya que los visitantes se abstienen de desplazarse hasta las playas por temor a que una ola les pueda golpear, lo que se traduce en pérdidas para los dueños de negocios y para los pescadores, puesto que no pueden salir a faenar y tampoco venden el producto que mantienen en reserva.
La proliferación de mosquitos, por las aguas estancadas que han vuelto a subir de nivel por las lluvias y las olas, es otro de los temas para los cuales la comunidad pide a las autoridades municipales se busque una solución, ya que es un sitio propenso para diferentes enfermedades.
