Tegucigalpa, Honduras
Con 1,800 nuevos custodios penitenciarios se busca controlar a los privados de libertad que se encuentran en los 31 presidios que componen el sistema carcelario del país.
Esa es la proyección del Instituto Nacional Penitenciario (INP) como parte del proceso de reforma y transformación de los penales.
Los nuevos elementos serían los encargados de llevar a cabo las medidas anunciadas por el Poder Ejecutivo para fortalecer el control de las cárceles.
El subsecretario de Seguridad, Luis Suazo, precisó que 150 agentes empezarán a egresar de la Academia Nacional Penitenciaria de forma mensual.
“Ya vamos alcanzando los 300 graduados del proceso que están distribuidos entre El Pozo I y II”, manifestó.
El funcionario confirmó que a la fecha se está preparando el cuarto grupo de custodios penitenciarios integrado por 60 personas y que en los próximos meses se comenzará con procesos más fuertes de preparación.
Para acelerar los procedimientos, la Secretaría de Seguridad ha puesto a disposición las instalaciones del Instituto Tecnológico Policial (ITP) de Comayagua, destacó.
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El INP cuenta en la actualidad con 2,000 agentes a los que se le sumarán los otros 1,800 custodios en los subsiguientes 12 meses para ser asignados entre todas las prisiones, incluyendo a los nuevos establecimientos penitenciarios que están por construirse en la nación.
EL HERALDO informó que las cárceles de todo el territorio serán equipadas con escáneres corporales, armas no letales al igual que vehículos especializados para el desplazamiento de convictos.
Como parte de las enmiendas también se han propuesto medidas como los juicios virtuales, grilletes electrónicos, el censo de reos a través de ADN y el registro dental promovidas por el Poder Ejecutivo.
El proyecto de reformaspara el fortalecimiento del sistema penitenciario anunciado por el presidente de la República, Juan Orlando Hernández, aún no ha llegado a la Secretaría del Congreso Nacional. |
No negociable
La aplicación y aprobación de pruebas de confianza es un requisito no negociable no solo para el personal que hace el servicio penitenciario de seguridad, sino también para los empleados que laboran en programas así como en el área administrativa del INP, puntualizó el también secretario técnico del despacho de Seguridad y Defensa.
Enfatizó que “todo el personal está pasando por pruebas de confianza, iniciamos con los agentes penitenciarios, estamos haciendo con ellos un seguimiento trimestral y sometiéndolos a un proceso de revaluación a más corto plazo”.
Los sistemas de cámaras instaladas en los presidios permiten verificar el comportamiento de todos los agentes encargados de brindar el servicio penitenciario, dijo Suazo.
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“La ley nos exige que por cada privado de libertad que va a una audiencia tienen que ir por lo menos tres custodios si son de máxima -peligrosidad- y dos si son de mediana”, sostuvo el funcionario.
Admitió que eso se traduce en una disminución de custodios en las cárceles cuando se desplaza un grupo de reclusos a audiencias que se desarrollan en los juzgados.
“Realmente el número -de agentes- que tenemos tampoco ajusta para mantener los controles que se necesitan y estamos trabajando para hacer estos ajustes, en redistribuir”, señaló el experto en temas de seguridad.
Agregó que “en la medida en que avanzamos en la construcción de los centros nuevos estamos bajando el hacinamiento que nos permite establecer los controles y poder distribuir las poblaciones”.
Los procesos que está llevando a cabo el INP promoverán una mejor administración de los penales, reiteró Suazo.