El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, manifestó este viernes su intención de tratar temas relacionados al desarrollo del Golfo de Fonseca en la próxima reunión que sostendrá con mandatarios de Nicaragua y Guatemala, en lugar de señalar los conflictos en la zona tripartita.
Durante el Consejo de Ministros celebrado hoy en la ciudad de Choluteca, al sur de Honduras, Hernández expresó que 'el Golfo de Fonseca no debe ser zona de conflicto, debe ser zona de paz y de desarrollo, debe ser un polo de desarrollo que derrame un cúmulo de beneficios para toda la región'.
'El sur de Honduras puede ser un gran polo de desarrollo y por tal manera esperamos que Dios nos acompañe el lunes en esa reunión con los presidentes de Nicaragua (Daniel Ortega) y El Salvador (Salvador Sánchez Cerén), donde debemos abordar temas interesantes en beneficio de la región', dijo el gobernante.
De igual manera, adelantó que ya se ha discutido un financiamiento por parte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para unir a Amapala con tierra firme por medio de un puente y reformar la carretera del sur, como una opción al Canal de Panamá para unir al Pacífico con el Atlántico.
'Estamos trabajando con todo esmero en este proyecto porque tenemos mucha confianza en esta zona y por todas las bondades con que cuenta', manifestó.
Los presidentes de Honduras, Nicaragua y El Salvador se reunirán el lunes en Managua para dialogar sobre el crecimiento económico y social en las comunidades del Golfo de Fonseca.
Ataques contra pescadores hondureños
A pocos días de la cumbre presidencial, los pescadores hondureños denunciaron ante el Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Condeh) que sienten temor de faenar en las aguas del Golfo de Fonseca porque son agredidos constantemente por miembros de la Naval de Nicaragua o de El Salvador.
'Estamos hartos de los atropellos que a diario sufrimos, ya sea dijo uno de los compatriotas, según el cual, cada pescador que es detenido por la Naval nicaragüense es obligado a pagar una multa o es despojado de sus implementos de trabajo.
Los pescadores se quejaron de que sus lanchas son quebradas e incluso que algunos han muerto producto de los ataques de la Naval de los países vecinos.
El 16 de mayo de 2014, una patrulla de la Naval de El Salvador embistió a una embarcación artesanal de pescadores hondureños. A raíz del hecho murió Luis Antonio Requena y resultó con lesiones de consideración Juan Carlos Elvir.
Entonces, la Naval salvadoreña reconoció la persecución contra los catrachos, mientras la Cancillería del vecino país prometió investigar el incidente.
En un ataque similar murió el 20 de marzo del 2010 el pescador Víctor Manuel Argeñal Gómez, originario de El Guapinol, municipio de Marcovia, Choluteca, a consecuencia de la embestida de una patrullera de la Naval de Nicaragua a la embarcación en la que se conducía con otro pescador en aguas hondureñas.
Al respecto, el titular del Conadeh, Roberto Herrera Cáceres, abogó por impulsar un proceso de desarrollo trinacional del Golfo de Fonseca, señalando que los pobladores de los países ribereños tienen derecho a gozar de mejores condiciones de vida, seguridad y empleo en esa región.
El ombudsman hondureño indicó que el desarrollo trinacional debe realizarse con base en el respeto de los derechos humanos y la armonía entre los pobladores y los gobiernos municipales de los tres países ribereños que integran Nicaragua, El Salvador y Honduras.