Al menos 300 menores infractores se encuentran recluidos en centros de internamiento del gobierno de Honduras, confirmó este martes la fiscal especial de la Niñez, Nora Urbina.
Urbina expresó hoy su posición particular sobre la posibilidad de reducir la edad punible en Honduras, ante la participación de menores de 18 años en diversos crímenes.
Al respecto, la funcionaria indicó que actualmente hay un promedio de 300 menores, de entre 12 y 18 años, recluidos en centros de internamiento de la Dirección Nacional de la Niñez y la Familia (Dinaf).
De estos menores, la minoría han sido enjuiciados por asesinato y, el resto, en delitos como robos o asociación ilícita.
Actualmente, por el delito de homicidio las leyes de Honduras establecen una pena máxima de ocho años de reclusión.
A criterio de Urbina, tampoco es conveniente elevar las condenas porque ya 'es suficiente castigo', cuando un menor se encuentra en una edad en la que debería convivir con su familia e ir a la escuela.
La abogada insistió en que la reducción de la edad punible 'no es la solución, porque se debe trabajar en el fondo y no en los efectos'.
Recomendó, además, 'trabajar más en prevención' y recordó que Honduras es signatario de tratados internacionales en los que se compromete a no reducirla.
'Sería un retroceso, una regresión, al respeto a los derechos humanos' que Honduras se comprometió a cumplir en dichos tratados, expresó.
Aclaró que esta es su posición personal, basada en su experiencia, y no la del Ministerio Público como institución.
El Congreso Nacional de Honduras podría debatir en los próximos días la reducción de la edad punible de los 18 a los 16 años, ante el uso de menores por parte del crimen organizado.
