Tegucigalpa.
Auto de formal procesamiento con medidas sustitutivas se dictó ayer en los Juzgados de lo Penal de Francisco Morazán en contra de una mujer que le quemó la mano a su hijo como una forma de castigarlo por robar cinco lempiras.
El juez que conoció el caso le otorgó a Lucy Soad Amador Martínez las medidas de no salir del país y presentarse a los Juzgados a firmar el libro de entrada una vez a la semana.
También resolvió que el menor permanecerá bajo la custodia de un familiar para evitar que sufra ese tipo de castigo.
Según el requerimiento fiscal, el pasado 6 de noviembre el niño, estudiante de una escuela en la aldea La Calera, de Francisco Morazán, habría tomado del escritorio de su maestra cinco lempiras, por lo que ella le llamó la atención y a la hora de la salida le puso la queja a la madre cuando esta llegó a traerlo.
Al siguiente día de manera anónima una persona denunció el maltrato de la madre por lo que un grupo de agentes de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) se movilizaron al lugar capturando a la presunta agresora.
Al ser detenida la mujer dijo que lo que había hecho fue para tratar de corregir a su hijo para que no volviera a tocar lo que no le pertenece.
La acusada permaneció varios días encarcelada en la Penitenciaria Nacional Femenil de Adaptación Social (PNFAS).
