Tegucigalpa, Honduras.- Con el grito... “Patria: Misión cumplida”, 35 oficiales de las Fuerzas Armadas, entre ellos cinco generales y 30 coroneles de la XXVI promoción, fueron dados de baja con todos los honores, en una ceremonia especial en el Campo de Parada Marte. Los uniformados, que dicen adiós, ingresaron a la institución castrense el 11 de diciembre de 1986 y al cumplir más de 30 años de servicio, salen y se unen a la vida civil, pero con el compromiso de estar prestos para cualquier llamado si lo requiere la patria.
El general de Brigada, Mario Arnaldo Bueso Caballero, en representación de sus compañeros de promoción que pasan a condición de retiro, en su intervención dijo: “Queremos dejar un mensaje de exhortación fraterno y respetuoso como soldados, a todos los miembros que conforman la institución, al liderazgo institucional, a todos los oficiales, cadetes, tropa y personal auxiliar, de continuar con los esfuerzos de orientar a las Fuerzas Armadas por la senda del profesionalismo, de mantener la doctrina, la mística, los valores, las tradiciones y buenas costumbres militares. Las Fuerzas Armadas de Honduras tienen sus propios retos y debemos fortalecerla”.
“Por consiguiente, ser fieles a la República, a la institucionalidad y sobre todo a las causas del pueblo hondureño. De cumplir a cabalidad lo dispuesto en la Constitución de la República y las demás leyes del país. De fortalecer los principios de jerarquía, disciplina y unidad de mando y observar en todo momento la trilogía de honor, lealtad y sacrificio”.
“La grandeza de las Fuerzas Armadas no se mide por su equipamiento o por los recursos que tenga, sino por la dignidad y el honor de sus soldados”, concluyó Bueso Caballero.