TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Desde el gobierno han reaccionado luego que Transparencia Internacional publicara un informe sobre el índice de percepción de corrupción que ubica a Honduras como el cuarto país peor evaluado en América.
Los tres países peores evaluados del continente son Venezuela, Nicaragua y Haití; por lo que Honduras se ubica en el cuarto lugar, algo que no gustó al oficialismo.
Mediante una conferencia de prensa, el ministro de la Presidencia, Rodolfo Pastor, indicó que “hubo un mandato para hacer justicia y luchar contra la corrupción e impunidad. Tenemos la función de luchar contra la corrupción, es una lucha contra la cual la presidenta se ha comprometido con la instalación de la CICIH y reconociendo el hecho que las instituciones no habían combatido la corrupción”.
Pastor dijo que Honduras ha estado inmersa en “una corrupción crónica” y señaló que tanto Transparencia Internacional como la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) tienen tintes y sesgos políticos.
“¿Quiénes y cómo se prepara ese informe? Se han dado pasos estructurales para combatir la corrupción. ¿Quién es ASJ y quién es Transparencia Internacional? Tienen sus sesgos y prejuicios políticos, se destaca que los países más poderosos no tienen índice de corrupción y los más pobres sí tienen... Ahí ya hay un prejuicio”, opinó.
Sin quitar el dedo del renglón, expresó que “estas organizaciones son representantes de intereses. El mejor momento de los informes que detectaron en términos de percepción fue en 2015 y no sé si se acuerdan, justamente en el 2015 fue cuando se cometió el saqueo del Seguro Social, pero Transparencia Internacional y la ASJ le daban a ese régimen la mejor calificación”.
Siguió diciendo que la corrupción es un problema de años e ironizó sobre las buenas calificaciones en este mismo informe durante las gestiones de Juan Orlando Hernández.
“La corrupción es el resultado de impunidad, falta de independencia judicial y desconfianza institucional. En dos años se ha buscado contrarrestar 12 años de corrupción agravada. Repito que hay un sesgo y posicionamiento de ese informe, ya que el problema de la corrupción es estructural y se viene arrastrando luego de 12 años”.
Agregó y finalizó diciendo que “recuperar la confianza de los ciudadanos va a tomar mucho más tiempo que dos años. Sí, hay un sesgo político e intención para atacar a quienes no están en la misma línea ideológica”.