Intensa actividad se prevé hoy en el Congreso Nacional con motivo de la socialización de las propuestas de ley relacionadas con el tema fiscal que probablemente serán aprobadas esta semana.
Los jefes de bancada y los empresarios han sido convocados para que en reuniones al efecto conozcan los alcances de la ley de medida antievasión que busca gravar con el uno por ciento del Impuesto sobre la Renta los ingresos brutos obtenidos por las empresas que durante los últimos cinco períodos fiscales hayan reportado pérdidas.
Este proyecto -que ya fue introducido al plenario y se encuentra en discusión en tercer debate- es rechazado por los empresarios, pero las comisiones del Congreso harán el último intento porque sea aprobado con el consentimiento de los inversionistas.
El otro tema se refiere a la Ley de Racionalización de las Exoneraciones, proyecto que fue retirado del Legislativo, tras recibir el mote de “sexto paquetazo”, ya que en su contenido habían medidas que constituían un zarpazo para los contribuyentes al fisco.
Ambas leyes no cuentan en este momento con el consenso de todas las fuerzas políticas del Congreso Nacional.
Son medidas con las que el gobierno de Porfirio Lobo y Hernández estima recaudar 1,600 millones de lempiras adicionales en el Presupuesto de la República y ahorrarse cerca de tres mil millones en el gasto público.
El presidente de la Comisión de Presupuesto II, Francisco Rivera, confirmó que esta semana ha sido convocado el Congreso Nacional para aprobar estas leyes.
Este lunes a las dos de la tarde se reúnen los jefes de bancada para la revisión del la ley del uno por ciento a efecto de que el miércoles sea ingresada al pleno para su aprobación, manifestó el congresista.
En cuanto a la Ley de Exoneraciones Fiscales, expresó que el proyecto ha retornado de nuevo a la cámara.
“Esperamos que las comisiones de dictamen trabajen sobre este proyecto y lo podamos someter a discusión en las sesiones de esta semana, porque urge su aprobación”, citó Rivera. El tema de las exoneraciones es un compromiso del gobierno con el FMI y el Banco Mundial.
