TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva, quien fue designada por la presidenta Xiomara Castro para intervenir el sistema penitenciario del país, aseguró este miércoles que se construirá un hospital para los privados de libertad.
La funcionaria se refirió al tema tras los múltiples tiroteos registrados en diferentes cárceles de Honduras, algunas de ellas consideradas de máxima seguridad, e indicó que dichas reyertas son debido a una estrategia de fuga.
Según ella, cuando los reos resultan heridos y son trasladados a los hospitales cercanos intentan burlar la seguridad de los policías que los escoltan. Incluso señaló que cuando las lesiones son leves son remitidos a centros externos, en lugar de ser atendidos por el personal médico contratado por el Instituto Nacional Penitenciario.
Ante esta situación adelantó que el ministro de Salud, José Manuel Matheu, le dio un hospital móvil que tenía la Secretaría de Salud (Sesal) para que lo instale en un centro penal y además anunció la construcción de un nosocomio para los internos.
“El doctor Matheu me da dado un hospital móvil que estaba en Danlí y lo vamos a instalar en Ilama para que ya no salgan, ya no van a salir (a consultas médicas)”, afirmó.
“Vamos a construir el hospital penitenciario. Tenemos seis meses para poder construirlo con área psiquiátrica, con visión de tratamiento contra drogas y medicina general y especializada y todos los que se hagan pasar por locos a pabellones especializados van a ir, ya no van a ir al Santa Rosita ni tampoco al Mario Mendoza, donde se quedan vegetando y después se escapan”, agregó Villanueva en entrevista con HCH.
La funcionaria dijo que esto será parte de su plan de intervención, el cual también contempla el decomiso de armas en los módulos, el bloqueo de llamadas en los centros penales, la reubicación de internos y la evaluación del personal penitenciario, con el fin de evitar que se sigan prestando al ingreso de objetos prohibidos y a que los miembros de estructuras criminales tengan una cuota de poder en las cárceles de Honduras.
