TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Indignación y consternación ha causado la misteriosa muerte de la estudiante de enfermería Keyla Patricia Martínez Rodríguez en el interior de una celda policial en la ciudad de La Esperanza, Intibucá.
Según declaraciones de las autoridades policiales, la joven de 26 años fue detenida el sábado por la noche debido al incumplimiento del toque de queda, aunado a una denuncia de desorden en la vía pública tras haber ingerido bebidas alcohólicas. Posteriormente, Martínez fue hallada sin vida en la celda donde permanecía detenida.
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Protestas
El repentino deceso de la joven promesa de Enfermería ha provocado reclamos y protestas de sus familiares y de la población en general; puesto que, se encontraba bajo custodia policial.Este lunes -en horas de la mañana- decenas de personas y organizaciones feministas protestaron en diversos puntos del país. Enfrente de la posta policial en la ciudad de La Esperanza sus parientes llegaron a exigir investigaciones profundas por la muerte de la joven de 26 años.
Gritando consignas y con pancartas 'justicia para Keyla' los manifestantes se mantuvieron en el lugar durante varias horas con la esperanza de lograr una explicación justa.
Sin embargo, pasadas las 10 de la mañana se desató un violento enfrentamiento entre manifestantes y policías que lanzaron gras lacrimógeno para dispersar la turba enardecida.
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Empatía de la población
Tras conocerse el caso de Keyla Martínez, la ciudadanía ha alzado su voz en apoyo a la familia doliente.En redes sociales son innumerables las publicaciones que se comparten como un gesto de empatía. El hashtag #JusticiaParaKeyla se volvió tendencia en Honduras.
¿Qué se sabe?
Keyla Patricia Martínez Rodríguez (26) fue detenida por la Policía Nacional alrededor de las 11:30 de la noche del 6 de febrero y diez minutos después fue ingresada a una de las bartolinas de la sede policial de La Esperanza.A las 3:30 de la mañana del domingo, luego de una inspección de rutina que uno de los policías hizo a las celdas, encontró a la joven moribunda, asfixiada presuntamente con una de sus prendas de vestir. “Ella estaba atada con su blusa, atada a la puerta de la celda hacia su cuello”, según Melvin Alvarenga, subcomisionado de Policía.
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Yessenia Rodríguez, tía de Keyla, manifestó que “hasta ayer (sábado) a las 9:00 de la noche Keyla estaba sobria, por que estaba acompañada de mi hija en una cena con sus amigas; donde nosotros tenemos pruebas que estaban compartiendo sin ninguna bebida alcohólica”, apuntó.
La pariente criticó que “queremos que se investigue esta situación, hay muchas contradicciones; hablan de escándalo público, de estado de ebriedad. Dicen una cosa, dicen otra, entonces nos llama mucho la atención”.
El cadáver de la estudiante fue trasladado a Medicina Forense, en la capital, para practicarle la autopsia de ley y continuar con el proceso de investigación para esclarecer su muerte. La Policía aduce que se trató de un suicidio, cuestión que está en tela de juicio debido a la manera en que falleció.
En el momento que se dio el hecho, en la estación policial estaban un oficial y dos policías de escala básica, quienes serían objeto de las investigaciones para saber cómo se dio la muerte.
