Tegucigalpa, Honduras
El histórico problema de infraestructura que arrastra el sistema educativo del país promete ser mitigado en 2018.
Júnior Velásquez, director de Construcciones Escolares de la Secretaría de Educación, detalló que para el próximo año el plan de infraestructura contempla en su mayoría la creación de nuevos centros educativos a nivel nacional.
“Hay un presupuesto que se maneja con un fideicomiso, pero ahí dependemos del gobierno que es quien lo tiene que ceder, son tres niveles en los que se trabajarán: jardines de niños, cobertura para media en zonas que no hay servicio y universalización del tercer ciclo”, expresó.
De fondos nacionales son al menos 700 millones los que estarían siendo necesitados para llevar a cabo los proyectos a nivel nacional.
En el caso de la creación de centros de tercer ciclo, se buscará beneficiar a las zonas que están en el corredor seco.
Según el entrevistado, cada centro educativo que se construya tendrá que ir dotado de mobiliario escolar.
Velásquez, manifestó además que con ese presupuesto se buscará mejorar los centros educativos que actualmente tienen problemas de infraestructura en el territorio.
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Cooperación
Para lograr un mayor alcance de mejoramiento de centros, la Secretaría de Educación hace uso de los fondos generados por la cooperación de países amigos.
Para el año que viene se espera que el Programa de Mejoras de la Infraestructura Escolar (Promine), ejecute nada menos que 15 millones de euros lo que equivale a más de 397 millones de lempiras (al cambio actual).
De esos 15 millones de euros, se destinarán tres millones para realizar proyectos de creación de centros de secundaria.
“Eso estaría enfocado en el área de La Mosquitia, el resto se distribuye en otros departamentos, como Santa Bárbara, Copán, Lempira y La Paz”, informó.
También Intibucá y Ocotepeque recibirán estos fondos.
En total, serán más 1,000 millones de lempiras los que se esperan para 2018.
Este año, debido a problemas climáticos, el sistema se vio afectado con 839 centros dañados por las lluvias.
Hasta este año no había un plan de contingencia ni mucho menos una planilla presupuestaria para reparación de centros en casos de percance y se tuvo que hacer un desembolso de emergencia vía decreto legislativo.
