TEGUCIGALPA, HONDURAS.- De repente el pasaje de bus de 4.00 lempiras pasó a costar 6.00 lempiras, el rapidito de 11 pasó a 13 lempiras y el taxi de L 13 subió a 15.
El golpe fue duro para Mauro Castro, un empacador de productos de un supermercado capitalino, quien desde el año pasado tiene que buscar una mejor propina para pagar el pasaje de bus y asistir a sus labores.
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Después de una intensa protesta de los operadores del transporte de personas a nivel nacional, estos lograron su demanda principal, aumentar la tarifa, pero el gobierno los contentó más con un bono por combustible.
Por lógica los ingresos aumentaron y mejoró la rentabilidad, pero el servicio sigue igual de pésimo. Don Mauro contó a EL HERALDO que por su trabajo sale a 8:30 de la noche y le toca cruzar la ciudad caminando a esa hora, porque no hay buses y mucho
menos taxis.
Tampoco hay respeto de rutas, el maltrato de algunos operadores es permanente, el volumen de la música es alto y la seguridad nula. El subsidio que daba el gobierno antes del 2018 para mantener una tarifa baja a los pasajeros de la capital ahora pasó a ser un proyecto de “descuento de combustible” directo para los dueños de las unidades del transporte a nivel nacional.
Los acuerdos se comenzaron a realizar desde agosto de 2018 con los empresarios del transporte de buses urbanos, interurbanos y de taxis en todas las regiones del país. Mediante una solicitud de información a la Oficina de Transparencia del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre (IHTT), EL HERALDO corroboró que en nueve meses se han erogado cerca de 66 millones de lempiras para este fin, a unas 7,000 unidades de buses y taxis a nivel nacional.
Los informes establecen que los 66 millones de lempiras solo corresponden a los pagos de diez meses de rebajas, es decir, se entregan unos 6.6 millones de
lempiras mensuales.
Acuerdos
Según el acuerdo, los buses urbanos grandes (por 26 días trabajados al mes) reciben un bono de descuento de 5,850 lempiras, el bus interurbano pequeño por iguales días trabajados tiene una rebaja de combustible de 3,250 lempiras al mes y el microbús irterurbano tiene un beneficio de
1,950 lempiras al mes.
Mientras que el bus urbano regular recibe por descuento de combustible 2,600 lempiras al mes, el urbano ejecutivo 1,950 lempiras (por los 26 días de trabajo) y los microbuses 1,300 lempiras. Mientras que en el servicio de taxis (también por 26 días de trabajo) cada unidad tiene una bonificación de 650 lempiras mensuales.
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EL HERALDO comprobó que el gobierno comenzó a cumplir el compromiso de pago hasta enero de 2019, pero de forma retroactiva los meses de agosto a diciembre, es decir, cinco meses del 2018. Mientras que los pagos de 2019, el IHTT comenzó a realizarlos a partir junio pasado y al cierre de noviembre solo habían cancelado el compromiso hasta mayo. EL HERALDO consultó ayer al IHTT sobre cuál ha sido el beneficio de este millonario desembolso al transporte, y prometieron contestar por escrito las preguntas. Hasta el cierre de esta edición no habían respondido.