Tegucigalpa, Honduras
Una millonaria reducción en la factura petrolera se puede registrar nuevamente este año en el país.
Cifras preliminares indican que las importaciones de carburantes pueden oscilar entre 1,350 y 1,400 millones de dólares durante 2016.
Autoridades del Gabinete Económico confirman que los resultados de 2015 se puede mantener a lo largo de 2016.
El efecto inmediato a corto plazo es evidentemente bueno para los ciudadanos como para las cuentas del Estado.
Esto porque Honduras es un importador neto de carburantes, contrario efecto se registra cuando el precio internacional se dispara.
No obstante, se espera que “el petróleo pueda andar por los 40 dólares a mediados del año”, dijo el presidente del Banco Central de Honduras, Manuel Bautista.
“Datos preliminares demuestran que la factura petrolera en 2015 fue menor en 680 millones de dólares menos a la de 2014”, indicó Bautista.
Sin embargo, la masiva importación de mercaderías preocupa al gobierno.
“Sin combustibles, las importaciones crecieron 13%” en 2015”, añadió Manuel Bautista.
Precios internos
Gracias a la caída del precio internacional, los combustibles en Honduras han bajado de precio.
De julio de 2015 a la fecha, la gasolina superior ha disminuido 21 lempiras, ya que pasó de 94.28 a 73.15 lempiras el galón.
La regular 18 y el diésel 17 lempiras. Las rebajas aplicadas representan un 22%, en promedio.
No obstante, la población se ha mostrado inconforme por el lento ritmo en que se han aplicado las rebajas en el país.
Miembros de la Coalición Patriótica consideran que la caída internacional no se ha aprovechado.
Las tarifas de transporte se mantienen al igual que el precio de la canasta básica, entre otros.
En ese sentido, solicitan al gobierno una revisión de las variables de la fórmula de precios de los derivados del petróleo.
Juan Carlos Rodríguez, presidente de la Coalición Patriótica, es del criterio que debe buscarse que el beneficio del ahorro por factura petrolera se torne a la clase más necesitada.
Indica que los que más impacta en el precio final es el impuesto del gobierno, que representa actualmente 43.7% del precio (31.80 lempiras en el caso de las gasolinas), y la devaluación de la moneda.
En tanto, los representantes de los importadores hondureños proyectan que los precios se van a mantener estables