TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El analista de los temas nacionales Olban Valladares lamentó que las comisiones interventoras lleguen a perpetuarse a las instituciones de gobierno.
Otro fenómeno es que las mismas personas que están liderando procesos de intervención son nombradas en otras instituciones, donde todavía no han logrado resolver la crisis.
“La teoría de la formación de comisiones especiales es para solventar de manera urgente situaciones que se presentan en algunas instituciones, donde se ha perdido la confianza o que internamente no existe la capacidad o la voluntad para encontrar soluciones a los problemas”, declaró.
El nombramiento de tantas interventoras refleja que algo está pasando con las instituciones, ya sea que toda la estructura está conformada de una forma ineficiente o que las personas que fueron nombradas para su administración no tienen la capacidad, la voluntad ni la formación académica para manejarla y conseguir sus objetivos.
Duraderas
“Sorprende que las comisiones en Honduras duran eternamente, como la del Seguro Social, ¿cómo es posible que lleven cinco años y el proceso interno de reestructuración no termina?”, cuestionó.
En todo este tiempo, en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) no se ha creado internamente la estructura moderna y eficiente para que otros funcionarios puedan asumir las funciones de la comisión interventora.
Luego las mismas personas pasaron a la comisión depuradora de la Policía Nacional para hacer una tarea tan complicada de depuración de la Policía y atendiendo al mismo tiempo al IHSS.
“Estas son las cosas que lo llevan a uno a pensar que las personas que manejan la política nacional están dando tumbos y que no hallan de dónde aferrarse para resolver los problemas internos de las instituciones”, analizó.
Valladares condenó que otro gran problema es que los funcionarios de las instituciones que son intervenidas se mantienen en sus cargos, cuando en otros países lo normal es que renuncien.