COMAYAGUA, HONDURAS.- Los cuerpos de los seis hondureños que murieron trágicamente en un incendio registrado el pasado 27 de marzo en una estación migratoria de Ciudad Juárez, en México, ya arribaron al territorio hondureño.
El vuelo con los féretros arribó a las 9:00 de la noche de este martes (11 de abril) al Aeropuerto Internacional Palmerola en Comayagua, zona central del país, cerrando así el capítulo de dolor y angustia que ha embargado a sus parientes desde el día de la mortal tragedia.
Edin Umaña, José Ángel Ceballos, Óscar Serrano, Dikson Córdoba, Jesús Alvarado y Alis Santos son las víctimas catrachas que perecieron tras salir de su tierra natal rumbo a Estados Unidos con sus mochilas cargadas de sueños y metas que fueron truncadas en la dura travesía del “sueño americano”.
Los familiares de los hondureños que viajaron hasta México tras el incendio, también llegaron en el avión de la Fuerza Aérea de México informaron las autoridades del Instituo Nacional de Migración (INM).
La Secretaría de Relaciones Exteriores había informado que la llegada de la aeronave estaba prevista para las 5:00 de la tarde de este martes, pero luego indicaron que hubo un retraso, por lo cual, la hora de llegada fue a las 9:00 de la noche.
Llegada
El gobierno mexicano inició la repatriación de los fallecidos el pasado viernes con el traslado de un colombiano y siete salvadoreños. Este martes continuaron con 17 guatemaltecos y seis hondureños
El vuelo hizo una escala en la ciudad de Guatemala, donde el canciller de ese país encabezó el traslado de los restos mortales.
En la nación cinco estrellas, Cancillería se encargó de realizar las gestiones pertinentes.
A las 9:10 de la noche había gran actividad en la terminal aérea, pues una caravana se encargó de trasladar los restos de los hondureños.
Incendio dejó 40 migrantes muertos
Según las autoridades mexicanas, el incendio se originó cuando un migrante encendió un colchón en la celda donde permanecía junto con otros 67 hombres, en medio de una protesta por una posible deportación.
En total perdieron la vida 19 guatemaltecos, siete salvadoreños, siete venezolanos, seis hondureños y un colombiano.
Imágenes de una cámara de seguridad mostraron que una vez desatado el incendio, ni el personal de migración ni el de seguridad hicieron algo por evacuar a los migrantes.
Bajo cargos de homicidio, autoridades mexicanas confirmaron la captura del migrante señalado de provocar el incendio, quien fue detenido junto a otras cuatro personas: tres funcionarios del INM y un vigilante privado. El sexto sospechoso es otro guardia privado, que permanece prófugo.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha garantizado que el caso no quedará en la “impunidad”.
La Secretaría de Salud mexicana reportó que además de los fallecidos, el accidente dejó 27 heridos, de los que 22 permanecen hospitalizados y hasta ahora cinco fueron dados de alta.