TEGUCIGALPA, HONDURAS.-El devastador huracán Iota, convertido ayer en tormenta tropical, comenzó a causar destrozos en Honduras. Inundaciones repentinas, vientos violentos, deslizamientos de tierra, caídas de árboles y una lluvia copiosa durante todo el día acompañaron el ingreso de la tormenta al territorio.
A pesar de haber cambiado su rumbo inicial, el ciclón tropical impactó más fuerte de lo esperado en muchas zonas del país, donde continuó la estela de desgracia que comenzó hace algunos días con la depresión Eta.
El fenómeno que atraviesa Honduras ya dejó a miles en la calle, destruyó viviendas, incomunicó comunidades, arrastró cosechas y ganado, dañó las tuberías, interrumpió el tendido eléctrico y tiene fuertes acumulados de lluvia en el país.
Silencioso en su llegada, Iota vino de menos a más, sacando carrera a miles que se resistían a dejar sus casas, pero al ver el poder del temporal no tuvieron otra opción que escaparse.
Las lluvias continuarán por el resto de hoy y mañana, la emergencia no termina, la destrucción comienza a evaluarse a medida pasan las horas.
Los pronósticos de acumulaciones de agua en el país serían entre 250 a 700 milímetros en varias regiones.
ADEMÁS: Las primeras imágenes del impacto Iota en Honduras
Devastador
Catalogado como catastrófico con vientos mortales, Iota entró a Honduras a través de la línea divisoria entre los departamentos de El Paraíso y Choluteca. Previo a su ingresó al país, las bandas del ciclón arrasaron con todo en su paso por el departamento de Gracias a Dios, donde la población ya esperaba su furia y aceptó salirse de las casas para no ser víctimas.
Una menor sería la primera víctima mortal, aunque no fue confirmada por las autoridades.
Sigiloso, con ráfagas de viento capaces de arrancar árboles, el fenómeno dejó sentir su presencia con una lluvia incesante que comenzó en la madrugada de ayer en casi todo el territorio.
Los primeros informes de daños se suscitaron en el departamento de Colón, específicamente con el desbordamiento del río Tocoa, que ni Eta había logrado poder sacar del caudal.
Casas inundadas e incomunicación vial se reportaron mientras en Santa Bárbara la furia se comenzaba a sentir con el desbordamiento del río Cececapa, que se llevó todo en su paso.
En El Progreso, Yoro, la tormenta continuó la desgracia de Eta, donde inundó varios barrios que ya estaban afectados y otros que se habían salvado del desastre.
En la comunidad de Chamelecón, el río no dejó dormir en paz a los pobladores por la amenaza latente de causar destrucciones inimaginables.
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En el oriente, el temporal mostró su furia al desbordar el río El Águila sobre el puente que comunica al municipio de Trojes con Danlí, El Paraíso.
Mientras en Los Terrones, un padre y su hijo se salvaron de milagro al ser arrastrados en su vehículo por un río, milagrosamente el irresponsable conductor logró salir con el menor y agarrarse de un cerco que estaba en la zona.
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En Francisco Morazán, específicamente Tegucigalpa, la tormenta tropical provocó la caída de árboles en diferentes sectores, postes del tendido eléctrico, dañó carros con la caída de rótulos y deslizó tierra en zonas altas.
Decenas de personas fueron sacadas de sus casas para acompañar en los albergues a otros que sí habían sido obedientes.
El río Choluteca elevó su caudal, por lo cual se mantuvo un monitoreo permanente de los socorristas.
Por su parte, en Siguatepeque, al menos 100 familias salieron con el agua a la cintura al desbordarse las quebradas y ríos.
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Tegucigalpa y San Pedro Sula fueron incomunicados por la caída de un alud de tierra en la zona de Taulabé, dejando a decenas de conductores atrapados con su familia en carros.
En La Entrada, Copán, el terror lo llevó el río Jagua que sin previo aviso se desbordó, inundando varios sectores, con varias pérdidas materiales.
El temor latente de los hondureños es que las lluvias no pararon en ningún momento, elevando el nivel de los ríos, lo que provocó que Copeco y la Policía Nacional anunciaran el cierre total de los ejes carreteros a nivel nacional desde ayer a las 6:00 PM hasta hoy a las 7:00 AM.
La Comisión Permanente de Contingencias anunció que Iota cambió su rumbo pero no su peligrosidad, en primera instancia se esperaba que tocara tierra por el departamento de El Paraíso, pero se ubicó más al sur en Choluteca.
En su recorrido vigente, el fenómeno impactará con fuerza los departamentos de Choluteca y Valle, donde ayer se reportaron masivas evacuaciones, pues se esperan fuertes inundaciones.
Iota afectará además la zona sur de Francisco Morazán, dejando lluvias más intensas en Tegucigalpa, pero por la magnitud de su tamaño inicial arrastra precipitaciones para todo el país.
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Se presume que hoy por la tarde saldrá del país con destino a El Salvador, ahora como una depresión tropical.
Hasta ahora el fenómeno tiene damnificadas a más de 65 mil familias que han sido ubicadas en 633 albergues en todo el territorio nacional. A estas personas se les ha entregado 66,000 raciones de alimentos y unas 200 mil mascarillas pues son víctimas propensas a contagiarse del covid-19 por el hacinamiento que existe en la mayoría de espacios habilitados.
letras del alfabeto para bautizar a los huracanes.
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