TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El científico hondureño, reconocido a nivel internacional, Enrique Aguilar Paz Cerrato, quien fue ministro de Salud en Honduras (1972- 1978), murió la noche de este sábado -20 de julio-, según informaron sus familiares. Tenía 93 años.
Hasta el momento no se ha confirmado el motivo de su fallecimiento, pero preliminarmente se maneja que murió a eso de las 7 p.m.
Familiares y amigos asistirán a su velatorio que se llevará a cabo este domingo -21 de julio- a las 10 a.m. en la funeraria La Auxiliadora.
El cuerpo del extinto profesional de las Ciencias Médicas será sepultado antes del mediodía del lunes -22 de julio-en el cementerio Jardines de la Paz Suyapa, en Tegucigalpa.
¿Quién era Enrique Aguilar Paz?
Aguilar Paz nació el 15 de febrero de 1931, en el Municipio de Pespire, Choluteca. Era hijo de Jesús Aguilar Paz y María Eva Cerrato.
Se casó con Rosbinda Paredes, con quien procreó cinco hijos: David, Claudia, Jorge, Rosbinda María y Jesús.
Realizó sus estudios primarios en la Escuela Álvaro Contreras, hasta el tercer grado y luego pasó a estudiar al colegio Salesiano San Miguel cuando éste se encontraba en Comayagüela.
Se graduó de médico general en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) en 1956.
Fue considerado un “hombre ejemplar” por su rectitud personal, el apego a las reglas de la moral y su compromiso de honrar a sus padres con una conducta intachable.
Su preocupación por los avances en un mejor sistema de salud hizo que impulsara la reforma del plan de estudios de las Ciencias Médicas en el país.
Su formación en la medicina le permitió ser reconocido internacionalmente, pues fue doctor en medicina y cirugía con estudios de especialización en otorrinolaringología y laringología.
Posteriormente, viajó a Buenos Aires, Argentina, donde realizó estudios de postgrado en otorrinolaringología. Continuó sus estudios complementarios en la misma área en Uruguay, Santiago de Chile, Bogotá, Colombia, Panamá, El Salvador, México, Estados Unidos, España y Alemania.
Su trayectoria
Aguilar fue profesor de la Facultad de Ciencias Médicas en la cátedra de ORL (1958-1972).
Fue docente en la facultad de Medicina de la Universidad Nacional, cargo en el que fue electo por unanimidad por el período de 1964-1967.
Sus actividades de docencia dieron paso a las actividades públicas como ministro de Salud en Honduras (1972-1978). También laboró en el hospital privado La Policlínica de Comayagüela.
Fue presidente de la Asociación Médica Hondureña durante dos períodos y fundador de la Asociación Hondureña de Otorrinolaringología.
El destacado hondureño fue miembro de la Asamblea Nacional Constituyente en 1981.
Además, fue candidato presidencial por el Partido Innovación Nacional y Unidad- Social Demócrata (PINU-SD) y diputado por ese mismo partido político.
Mensajes de condolencias
Sus seres queridos recordarán al doctor Aguilar como un gran ser humano, quien en vida formó a grandes profesionales, quienes ahora honrarán su fallecimiento.
“Mucho pesar por el deceso del honorable doctor Enrique Aguilar Paz Cerrato. Me apoyo como reportera ofreciéndome conocimientos y luego en la presentación del videobook de crónicas y reportajes históricos. Aquí en el Museo de Identidad Nacional en el año 2017, lo entrevisté cuando fue candidato presidencial del PINU. Que Dios lo reciba en su seno”.
“Enrique Aguilar Paz: un gran hondureño, hombre íntegro y honesto, excelente médico, excelente esposo, padre, hijo, abuelo y por supuesto suegro. Hoy Honduras pierde uno de sus mejores hombres que deja un legado para todos”.
“Ha fallecido el Dr. Enrique Aguilar Paz Cerrato hoy 20 de julio. No es casualidad que su partida coincida con el “Día de Nuestra Nacionalidad”, en conmemoración del cacique Lempira, héroe nacional. El Dr. Aguilar Paz Cerrato también es héroe nacional. El mejor ministro de Salud de Honduras de todos los tiempos.
“Estamos muy triste. Hoy Honduras ha perdido uno de sus mejores hombres. Q.D.D.G., el Dr. Enrique Aguilar Paz. Brille para él, la luz perpetua. Amigo, doctor y correligionario muy querido de mi padre y familia todo mi cariño y respeto para sus hijos amigos cercanos de toda una vida”.
Estos son algunos de los mensajes que han dejado sus amigos, compañeros de trabajo, colegas, familiares y alumnos, a quienes sirvió como instructor de la lucha durante muchos años.
