El pastor evangélico Mario Tomás Barahona insiste ante las autoridades del Tribunal Supremo Electoral (TSE) que procedan a su inscripción como precandidato a una diputación por Francisco Morazán dentro de uno de los movimientos internos del partido Nacional.
Mario Tomás Barahona, líder de la congregación Mi Viña, fue inhabilitado en las elecciones de 2005 por lo que a última hora tuvo que ceder su cargo a su hijo Mario Alexander Barahona.
Barahona padre exige que el TSE se pronuncie en torno a su caso ya que considera que se le está excluyendo del proceso de manera ilógica, puesto que junto a él aspiran unos 40 pastores evangélicos. Indicó que él fue inhabilitado ilegalmente, pues cuando se emitió la resolución ya le había otorgado el permiso para ausentarse del púlpito por parte de la Confraternidad Evangélica de Honduras.
Miembros del TSE esperan un informe de la Procuraduría acerca de los efectos de una demanda que interpuso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos el pastor evangélico, por 10 millones de dólares.
Barahona dijo que como hondureño cumple todos los requisitos para aspirar a un cargo público y se preguntó por qué se ensañan contra él, si en lugar de ser un corrupto es un hombre de Dios.
En ese sentido, dijo que Honduras eso es lo que necesita, hombres honestos, temerosos de Dios, que estén conscientes de que Honduras va hacia un abismo y se necesita del concurso de los mejores hondureños para sacarlo de ahí.