TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El Día de la Madre representa un antes y un después del covid-19 en Honduras. Ni la reapertura de la economía, tampoco el feriado de Semana Santa ni las fiestas de Navidad resultaron ser tan peligrosos en el país como el segundo domingo de mayo. A seis días de la celebración para mamá, la Unidad de Datos de EL HERALDO Plus muestra una correlación que posiblemente hubo entre el festejo del año pasado con la explosión de casos.
El primer brote fuerte en Tegucigalpa del 2020 ocurrió días después de agruparse en familia para agasajar a las madres y a la vez cargar con el virus de un hogar a otro sin tomar conciencia.
Se confirmó que entre cinco y 20 días después de la celebración a mamá, los pacientes con síntomas de covid-19 en Honduras aumentaron en siete veces más y los casos confirmados por PCR crecieron en 480 por ciento.
La ola de contagios del virus desató su ira irónicamente con un abrazo a mamá.
LEA: Saturación en UCI presagia alta mortalidad en Honduras
Peligro
Ya pasaron 94 años desde que bajo el mandato del expresidente hondureño Miguel Paz Barahona se determinó celebrar el segundo domingo de mayo como el Día de la Madre.
Desde ese 25 de enero de 1927, niños, jóvenes, adultos y ancianos esperan la fecha para visitar a mamá, llevarle desde una flor hasta el regalo más grande que su economía les permita.
La fecha reúne familias enteras, separadas por la distancia geográfica, enemistades o incluso por la falta de tiempo, todo para agradar a las madrecitas.
El año pasado no fue la excepción, con la única diferencia que el mundo entero estaba atravesando la peor pandemia en la historia por un virus detectado en Wuhan, China.
TAMBIÉN: Francisco Morazán, El Paraíso y La Paz, azotados por la pandemia
La Unidad de Datos de EL HERALDO, mediante una solicitud a la Secretaría de Salud (Sesal), recibió de la Unidad de Vigilancia de la Salud un informe con los casos positivos de Tegucigalpa, donde se detalló la cantidad de pruebas realizadas por fecha, la recepción de las pruebas en el laboratorio de virología, la confirmación también por fecha de los resultados positivos y, algo que no se tomó en cuenta hasta ahora, la cantidad de personas contagiadas según la fecha que comenzaron a presentar síntomas de covid-19 entre marzo y agosto de 2020.
El análisis a esta información muestra que después del Día de la Madre el covid-19 se propagó con mayor agresividad en la capital de Honduras, enfermó a más personas y preparó el terreno para un festín de casos en la reapertura económica.
Las cifras muestran que para el 8 de mayo (dos días antes del Día de las Madres) un total de 77 capitalinos se habían realizado la prueba PCR para saber si poseían el covid-19.
ADEMÁS: Proyectan un tsunami de unos 1,000 casos de covid-19 por día en Honduras
Al día siguiente, apenas 24 horas antes de la celebración acudieron 105 personas (37 por ciento más que en dos meses) para confirmar si estaban o no positivos del coronavirus.
Hasta ahí podría tratarse de una casualidad o la intención de las personas en conocer si portaban el virus, debido a su intención de visitar al siguiente día a sus madres para celebrar su día.
La tesis comienza a tomar más forma cuando se observa en las cifras que para antes del segundo domingo de mayo del año pasado (a dos meses desde la llegada de la enfermedad al país) apenas 411 personas en el Distrito Central habían reportado a las autoridades de Salud tener algún tipo de síntoma del coronavirus, pero un mes después del Día de la Madre la cifra subió a 3,133 personas en la ciudad.
Es decir que con las familias reunidas para agasajar a las mamás, la cantidad de personas enfermas se elevó en un 700 por ciento (siete veces más).
ES DE INTERÉS: Casi un 80% de ocupación hospitalaria por covid-19
¿Cómo pasó?
Si se toma en cuenta que la incubación del virus en una persona tarda entre cinco a quince días para mostrar síntomas de la enfermedad, se puede medir cómo fue el comportamiento del covid-19 posteriormente al Día de la Madre.
Cinco días después de la celebración a mamá, 192 personas ya habían acudido a un hospital por algún síntoma.
Entre cinco y 20 días después, cuando se supone que la enfermedad ya estaba incubada en el cuerpo de las personas, 2,037 personas ya habían acudido a un centro asistencial con síntomas.
Pero no solo eso, los datos de la Unidad de Vigilancia de Sesal en poder de EL HERALDO mostraron que dos meses antes del Día de la Madre, apenas habían sido confirmados con un resultado positivo 270 personas en Tegucigalpa y solo un mes después de la celebración a mamá los casos positivos alcanzaron 1,264 capitalinos.
VEA: Salud asegura que tiene listo el plan para la jornada de vacunación
Estas cifras son puntuales, pero representan muchos más casos si se toman en cuenta de forma exponencial, ya que por cada contagiado hay entre tres y cinco personas más que portan el virus en su cuerpo, y muchos de ellos resultan ser asintomáticos.
Con el canal de propagación abierto en el Día de la Madre, la reapertura económica en su primera fase desarrollada a mediados de junio resultó en una fiesta de personas contagiadas en las calles.
Otros factores que influyeron en la propagación fueron los recorridos que realizaron las personas desde unos departamentos a otros para visitar a sus madres.
Actualmente en el país, según cifras brindadas por el viceministro de Salud, Roberto Cosenza, en conferencia de prensa en San Pedro Sula, entre 40 y 42 personas pierden la vida al día por culpa de covid-19.
La economía está abierta, las restricciones son más flexibles, pero en las manos de las personas está no aumentar la propagación, por lo cual un abrazo a mamá en su día puede ser fatal.
TE PUEDE INTERESAR: ¿En qué departamentos circula la nueva cepa y qué cifras alcanzan esos lugares?
