TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Luego del caos vivido el pasado fin de semana en la sala de Cuidados Mínimos para niños prematuros del Materno Infantil, las autoridades de ese centro asistencial aseguran que la pesadilla terminó.
Minutos de angustia vivió el domingo anterior personal médico, de enfermería y hasta padres de familia tras la inundación que sufrió esa unidad en la que permanecía ingresado al menos un recién nacido.
ADEMÁS: Hospital Escuela separa con espadadrapo a pacientes con Covid-19
+Hasta prisión habrá para quienes no usen mascarilla
+¿Cómo atender en casa a un infectado por coronavirus?
Según Edilberto Enrique Ortiz, miembro de la Comisión Interventora del Hospital Escuela, los daños provocados por las correntadas de agua que caín dentro de la sala ya fueron reparados. “Se dieron problemas de inundaciones, pero fueron reparados de manera rápida por el personal de servicios generales”.
“El proceso de reparación apenas fue de limpieza de los drenajes, aunque ese fue el principal motivo por el que se presentaron las inundaciones”, recalcó Ortiz.
Sobre los problemas ocurridos con el fluido eléctrico, también a causa de las tormentas, Ortiz explicó que “personal de la Empresa Energía Honduras (EEH) se presentó a realizar las reparaciones respectivas en los transformadores, que eran los que presentaban
los inconvenientes”.
En relación a la división de las salas de contagiados de Covid-19 y las enfermedades comunes apenas con una cinta adhesiva, manifestó que “no es una sala de Covid, sino que es el área de emergencias de cirugía, donde se están haciendo reparaciones para cambiar algunas divisiones, para que los pacientes tengan privacidad”.
ADEMÁS: Ministra de Salud: 'Es difícil para mí, con tanta ocupación, atender goteras'
