Tras haber protestado
Tegucigalpa. Cansado de tantos rumores que lo señalan como supuesto narcotraficante, el exalcalde de Talanga, Roosevelt Avilez, aclaró ayer en el programa “Frente a frente”, de Canal 5, que jamás se ha dedicado al tráfico de drogas.
“Ya me cansé de una cosa de que nunca en mi vida he hecho, creo que hay un Dios en los cielos, él es mejor juez que tenemos”, y luego remarcó que “nunca he cometido un acto de esa naturaleza”.
Avilez confesó que durante varios años prefirió no procesar a ninguna de las personas que lo tildaban de capo porque “el que nada debe, nada teme”, pero luego de que sus dos hijas fueran objeto de burla en la escuela por parte de compañeros que les dijeron que “su papá es narcotraficante”, decidió salir al paso de esos rumores.
Contó que sus dos niñas fueron cambiadas de escuela por medidas de seguridad, y que en el nuevo centro escolar unos estudiantes les dijeron que “ustedes se cambiaron de escuela porque su papá es narcotraficante” y “eso me impacto muchísimo...”
Por varios años su esposa y sus padres le dijeron que acusara a quienes lo apuntaban como narcotraficante, pero que ahora se arrepiente de no haber hecho caso porque posiblemente así se hubiera evitado que el rumor creciera tanto.
Avilez fue alcalde de Talanga, Francisco Morazán, en los períodos 2006-2010 y 2010-2014, pero perdió su nueva postulación al cargo en las pasadas votaciones.
Cuando se lanzó al cargo por primera vez, el expresidente Porfirio Lobo, que en ese momento era titular del Congreso Nacional y era el candidato presidencial del Partido Nacional, se reunió con él para preguntarle si era cierto que era narcotraficante y él se lo negó.
Recordó cuál fue la respuesta textual que le dio al exgobernante: “‘Pepe’, usted es el presidente del Congreso y le agradecería que por su medio me lleve a la Embajada de Estados Unidos y donde sea y que me investigue”.
Tras esa respuesta, Lobo le dijo que confiaba en su palabra.
“Roosevelt, con lo que usted me ha dicho confío en usted, usted es mi candidato en Talanga”, comentó Avilez que le respondió Lobo.
También invitó a la Embajada de Estados Unidos y a la DEA a que “si no están investigando, que me investiguen”.
El rumor de que es narcotraficante se extendió tanto que en una oportunidad un empresario de San Pedro Sula, al que no identificó, le ofreció sus empresas para ayudarle a lavar 200 millones de dólares, contó.
Avilez asegura que se molestó con esta persona y le aclaró que él nunca ha obtenido dinero del crimen organizado.
Sobre su patrimonio económico, el exalcalde aseguró que lo ha forjado con sacrificios y trabajo honrado que le han permitido tener “5 o 6” propiedades” y una casa de playa que le regaló su suegra.
En 1990 comenzó sus inversiones al fundar una ferretería gracias a un préstamo y posteriormente se dedicó al rubro de la construcción.
Es así que desde 2000 ganó licitaciones internacionales para la construcción de 100 viviendas, perforaciones de pozos y otros en Talanga y “es así como hemos obtenido nuestras ganancias lícitamente”.
