TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El número de víctimas mortales a causa del dengue sigue en ascenso en Honduras. La Secretaría de Salud informó que contabilizan 62 personas fallecidas por la mortal enfermedad en la semana epidemiológica número 30.
El informe de Salud confirma que las muertes sospechosas por dengue grave son 174, mientras descarta que 18 hondureños hayan fallecido por esa enfermedad.
La semana anterior fue una de las más críticas porque se contabilizaron alrededor de 1,131 casos, un poco más de 160 por día; mientras tanto el acumulado refleja que se han reportado 42,346 casos de dengue sin signos de alarma hasta la fecha y 9,793 cuadros de dengue grave.
Las cifras podrían incrementarse con el transcurrir de los días si se no toman las medidas preventivas que amerita la crisis, advirtieron las autoridades de Salud; los departamentos de Cortés, Yoro, Atlántida, Francisco Morazán y Santa Bárbara son los que presentan mayor número de infectados con el virus y los centros hospitalarios de Tegucigalpa y San Pedro Sula se encuentran colapsados, siendo los niños las principales víctimas del zancudo Aedes aegypti.
Piden cooperación internacional
Mientras el dengue sigue cobrando vidas, el comisionado nacional de los Derechos Humanos, Roberto Herrera Cáceres, recomendó a los ministros de Salud de Centroamérica reunirse y plantear la necesidad de cooperación complementaria a los esfuerzos que se realizan para enfrentar esta epidemia.
El ombudsman hondureño advirtió que ya se está entrando en el período más peligroso: agosto, septiembre y octubre, cuando arrecian las lluvias.
“El virus sigue atacando tanto a Honduras como al resto de los países centroamericanos y, en este sentido, todos los países tendrán que unirse”, declaró.
Agregó que es necesario que las autoridades sanitarias de la región hagan un esfuerzo común y se plantee ante la comunidad internacional las necesidades de recibir una cooperación complementaria a los esfuerzos realizados hasta ahora.
La OPS/OMS y el Ministerio de Salud de Costa Rica crearon el juego “Pueblo Pitanga. Enemigos silenciosos”, que busca generar conciencia sobre el dengue y promover acciones comunitarias para eliminar los criaderos del mosquito.
Herrera Cáceres calificó la situación que se vive en Honduras de “humanamente intolerable”, ya que hay mucha gente enferma y numerosas familias han perdido a uno o más miembros, en su mayoría niños, tras ser atacados por el zancudo transmisor del dengue.
“Tenemos que dar una respuesta más categórica en la cual la unidad se demuestre en la realidad. Hay que contribuir a sensibilizar sobre el peligro que constituye esta amenaza”, acotó. Finalmente indicó que se debe hacer una labor efectiva de limpieza.
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