Por tercer día, los dirigentes del transporte a nivel nacional sostienen un paro de labores exigiendo al gobierno que se rebaje al menos 20 lempiras al precio del galón de combustible.
La lucha de los transportistas ha sido apoyada por varios sectores de la población, no obstante también ha sido objeto de personas infiltradas que realizan actos de violencia escudándose en la toma de calles.
Ante ello, la dirigencia del rubro emitió un comunicado oficial para condenar los actos de violencia que se susciten en el paro de labores.
'Condenamos y lamentamos todo acto de violencia, vandalismo e injerencia política que deslegitime nuestra causa', indica el comunicado.
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Asimismo, los transportistas indicaron que no iban a impedir la libre circulación para buses escolares, ambulancias, bomberos y vehículos de socorro.
Este lunes algunas calles de la capital y de las principales ciudades de Honduras amanecieron obstaculizadas por parte de los conductores de las unidades, quienes aseguran no detendrán la lucha hasta que el gobierno no les dé una respuesta positiva.